Ventajas de cocinar al vapor
Por: Leire Moneo
Periodista experta en alimentación
Actualizado: 21 de septiembre de 2022
La cocina al vapor es una de las técnicas culinarias más antiguas del mundo, pero no por ello ha perdido ni una pizca de atractivo. Todo lo contrario, pues en los últimos años se ha convertido en un método cada vez más empleado por aquellas personas que quieren comer sano sin renunciar a disfrutar de recetas sabrosas y rápidas. De hecho, la idea de que se trata de un tipo de cocina sosa y algo insulsa, propia de las personas que están a dieta o que tienen algún tipo de problema digestivo, ha dejado paso a una etapa en la que el vapor se ha convertido en uno de los procedimientos más utilizados tanto en los hogares como en los fogones de los grandes chefs de renombre.
La razón del boom de la cocina al vapor no es otra que las muchas bondades que caracterizan a esta técnica, argumentos más que sólidos para poner a este método en el lugar que merece:
Preparaciones al vapor, más sabor y menos grasa
La cocción al vapor “es un procedimiento muy delicado, pero que aporta muchos beneficios, ya que no resulta agresivo con el producto utilizado. Esto ayuda a aplicar las cocciones justas para cada comida, dejando el alimento en su punto preciso, lo que se traduce en grandes ventajas como el hecho de que no se añaden grasas externas y, lo que es más importante, que los alimentos conserven intactas todas sus propiedades, desde sus nutrientes hasta sus vitaminas y minerales, algo que se deja ver, por ejemplo, en que las verduras mantienen sus colores originales”, explica el chef Erwan Poudoulec, director técnico de Le Cordon Bleu Madrid, quien añade que “disfrutar de una cocción sin el consumo de grasas quemadas nos permite tener una mejor digestión y, por tanto, una asimilación más adecuada de los nutrientes”.
Muy al contrario de la extendida creencia popular, la cocina al vapor no tiene por qué ser insípida ni sosa. De hecho, ocurre todo lo contrario, ya que los alimentos preparados de este modo mantienen su textura, su consistencia y su olor originales, lo que significa un sabor más intenso. “La característica principal de esta técnica es que permite la eliminación de las grasas y los aceites externos, pero sin perder su jugo y eso ayuda a que el resultado sea muy sano, pero también muy sabroso, ya que nos comemos el alimento puro, sin someterlo a altas temperaturas por lo que conserva todas las propiedades, así como todos los sabores y los aromas. Incluso, en el caso de los vegetales, este tipo de cocina puede potenciar sus matices en boca”, asegura Vicente de la Red, chef que dirige los fogones del restaurante madrileño Bacira junto a Gabriel Zapata y Carlos Langreo, expertos en recetas fusión de Oriente donde la técnica al vapor es una de las más utilizadas.
Creado: 26 de octubre de 2016