Diagnóstico y tratamiento de la onfalitis
Actualizado: 29 de julio de 2022
El diagnóstico de la onfalitis es ante todo el clínico: la presencia de secreción maloliente en un cordón de aspecto inflamado que todavía no se ha caído es fácil de reconocer. Es importante un diagnóstico precoz para evitar la aparición de complicaciones, y que la infección no progrese.
En ocasiones se puede tomar una muestra de la secreción del cordón con un bastoncillo para hacer un cultivo microbiológico y determinar cuál ha sido exactamente el germen que ha producido la infección. Sin embargo, el resultado definitivo de esta prueba puede tardar varios días, por lo que la decisión de iniciar o no un tratamiento no depende de su resultado.
Para determinar la extensión de la infección también se recogerán muestras de sangre para realizar análisis de sangre y cultivo microbiológico, para valorar si están elevados los marcadores de infección.
Dependiendo de la gravedad, en ocasiones la onfalitis requerirá ingreso hospitalario para la administración de antibiótico intravenoso durante al menos siete días. En los casos más graves o causados por gérmenes muy agresivos puede ser necesario el desbridamiento quirúrgico, aunque esto es excepcional.
Creado: 14 de abril de 2014