Cómo hacer un masaje a tu bebé
Por: Leire Moneo
Periodista experta en alimentación
Actualizado: 22 de septiembre de 2022
Ponerse en manos de un fisioterapeuta no significa que el papel de los padres quede fuera de juego; todo lo contrario, pues los expertos coinciden en señalar que los padres son los grandes aliados de los especialistas en fisioterapia infantil. “Los bebés necesitan el contacto físico como medio de relación natural, pues es necesario para su desarrollo físico, psíquico y cognitivo, como así lo demuestran innumerables estudios. El contacto físico a través del masaje ayuda a afianzar el apego con los padres y propicia niños más seguros”, afirma Noelia Sáenz, miembro de la Asociación Española de Fisioterapeutas.
Esta experta explica cómo deben los padres hacer un masaje a su bebé: “el masaje siempre debe ser una experiencia positiva, y para ello buscaremos el momento en el que el bebé esté receptivo a este tipo de contacto. Propiciaremos un ambiente cálido, agradable y sin ruidos, prestando atención a que el niño no pase frío. Puede ser una buena idea el masaje antes o después del baño. Calentaremos por frotación nuestras manos, y no se insistirá ni apretará en ningún área corporal. Se puede realizar sin crema, o también utilizar una crema hidratante, siempre sin alcohol, ya que su rápida evaporación haría sentir frío al bebé.
Colocaremos al niño bocarriba sobre nosotros (si es preciso lo cubriremos con una mantita o toalla), deslizaremos nuestras manos desde el pecho a los hombros y brazos hasta las manos, y desde el pecho a la barriguita y a las piernas, recorriendo toda su superficie corporal; luego realizaremos la misma rutina tumbado bocabajo.
Terminaremos en carita y cuello, finalizando con un tierno abrazo. No debe durar más de 5 minutos, para evitar las desagradables hipotermias y la relajación de esfínteres”.
Cómo curar los cólicos del lactante en casa
Bajo una buena indicación profesional, los masajes en casa también pueden tener una motivación curativa. Es el caso de los cólicos del lactante, un problema muy frecuente que los papás pueden resolver con un poco de práctica. Con el talón de la mano giramos en la dirección de las agujas del reloj, dibujando un círculo para ayudar a reforzar el sistema digestivo. En caso de estreñimiento, la profesora del Departamento de Fisioterapia de la Universidad de Sevilla, Raquel Chillón, aconseja “realizar pequeños movimientos circulares por encima del trayecto del intestino grueso, es decir, del lado derecho de la pelvis hasta las costillas, luego transversal, y finalmente bajar desde la parrilla costal izquierda hasta la pelvis”.
A pesar de que todavía es una disciplina desconocida para la mayoría de familias, la fisioterapia infantil es una herramienta clave para que los niños crezcan en armonía y con vitalidad. El calor, la ternura y la seguridad de las manos de un profesional, pero también las de los padres, son en muchos casos la mejor medicina para mejorar la salud del bebé.
Creado: 15 de diciembre de 2015