¿Desde qué edad se puede practicar la matronatación?

Llegados a este punto, la pregunta suele ser ¿cuándo empezamos con la matronatación? En líneas generales, es recomendable esperar hasta los 4-6 meses de vida para llevar al bebé a la piscina, puesto que es cuando su sistema inmunológico se encuentra más desarrollado y evitaremos posibles infecciones, otitis y problemas similares. Esperar más puede suponer que el niño tenga ya cierto miedo y desconfianza al agua. Sea como sea, cada niño es distinto y nunca debemos presionarle; se trata de que disfrute de la experiencia para que saque el máximo partido de ella.

Un aspecto que puede favorecer su tranquilidad es la temperatura del agua, de ahí que sea recomendable acudir a una piscina cubierta climatizada, donde la temperatura del agua ronde los 32 grados centígrados.

Piensa que el bebé necesita tiempo para aclimatarse a la temperatura, espacio, ruido, gente, etcétera. Aprovecha para intercambiar opiniones con otros padres, y si tienes alguna pregunta plantéasela al profesor.

Otro punto a tener en cuenta es el horario. Estas sesiones no deben perturbar su ritmo diario habitual por lo que hay que buscar una hora en la que el bebé no tenga que dormir ni que comer. La matronatación favorece la conciliación del sueño y el buen descanso; tenerlo en cuenta y aprovecharlo puede ser de mucha ayuda para los padres que tengan niños a los que les cueste dormir.