Los primeros chapuzones de tu bebé
Actualizado: 29 de julio de 2022
Te damos algunos sencillos consejos para disfrutar con tranquilidad los primeros chapuzones del bebé. Ya en la piscina, rodea tu pequeño entre tus brazos, llévatelo al pecho y háblale para que se sienta tranquilo y se vaya relajando. Aprovecha para dar un pequeño paseo por la piscina mojándole poco a poco.
Las clases de matronatación no deben duran más de 30 minutos para no agotar al bebé. Sin embargo, las primeras sesiones suelen ser más cortas y, a medida que se acostumbra y se siente más cómodo y confiado, éstas se van alargando.
Durante estas primeras sesiones, el niño se dedica a chapotear, jugar con los otros niños y realizar ejercicios muy sencillos, simplemente para ir adaptándose a la temperatura del agua. Con el objetivo de lograr equilibrio y fortalecer el tono muscular, los juegos se realizan con pelotas, tablas, aros o flotadores. También se recomienda desplazar al bebé en el agua (acunándolo, haciendo elevaciones dentro y fuera del agua…), favoreciendo así la flexibilidad.
Se estima que, en cuatro sesiones aproximadamente, el bebé puede alcanzar el objetivo buscado: aprender a reaccionar sin miedo bajo el agua y fortalecer el vínculo con sus progenitores. Lo fundamental es que padres e hijos disfrutéis de esta actividad. Para ello, y para que se aclimaten sin problemas y vayan cogiendo confianza al agua, los primeros días es conveniente que los padres participen. Y decimos padres, porque para los papás este tipo de clases pueden ser muy importantes, ya que su vínculo con el bebé –especialmente si se ha optado por la lactancia materna, el método canguro, etcétera– puede ser menor y de esta manera el bebé aprenderá a confiar más en su padre y reforzarán así esos lazos.
Asimismo, es oportuno acudir al pediatra para realizar un control médico previo al inicio de la actividad. Todo ello para poder disfrutar de esta enriquecedora experiencia con total tranquilidad.
Creado: 21 de julio de 2011