Cumpleaños infantiles

Llega el día del cumpleaños de nuestro hijo y todos los padres queremos lo mejor para lograr que sea un evento inolvidable. Payasos, títeres, piscinas de bolas, castillos hinchables, magia, actuaciones musicales…; hay mil y una opciones para superarse un año tras otro. Pero lo más importante es que los pequeños de la casa disfruten de cada momento, incluso con los preparativos previos, y que se beneficien del cariño que reciben de sus amigos y familiares. Veamos esta celebración como una excelente oportunidad para que ellos se socialicen, compartan, aprendan a agradecer los detalles, y fortalezcan su autoestima, al ser los grandes protagonistas del evento y sentirse muy queridos.

8 Ideas para preparar un cumpleaños infantil

Cada niño y cada familia son un mundo, y en la celebración del cumpleaños de tu hijo se deben tener en cuenta numerosos factores, desde su edad y sus gustos, hasta la época del año en que tiene lugar el evento, pero estos consejos te ayudarán a convertir ese día en un bonito recuerdo de su infancia:

• Haz las primeras celebraciones más discretas: cuando tu hijo es aún un bebé la celebración de su cumpleaños no debe ser muy pomposa, ya que es demasiado pequeño para disfrutarla realmente e interactuar como la ocasión requiere (¡probablemente no sea capaz ni de soplar las velas del pastel!). Bastará con pasar el día en familia y darle mucho, mucho cariño.
• Dejarle ir participando: ya a partir de los tres años los niños sí que pueden y deben intervenir en la preparación de sus cumpleaños, mostrando sus deseos, ilusiones y preferencias. Nos indicarán a quién quieren invitar, qué juegos les gustan más, qué tipo de tarta prefieren, o qué regalos desean; y el disfrute será cada vez mayor.
• Forma grupos de invitados homogéneos: lo mejor para que todo el mundo lo pase bien es que los invitados a la fiesta sean de edades y gustos afines. Por eso, lo aconsejable es organizar por un lado una comida o celebración más familiar con los adultos y, por otro, un cumpleaños infantil con todos sus amigos, vecinos, o parientes de su edad. Lo fundamental es no olvidarse de nadie que para el niño sea importante.
• Envía unas invitaciones originales: ¿qué tal un mensaje dentro de una botella o un texto escrito en un globo?: lo enviamos deshinchado e indicamos que hay que inflarlo para que aparezca la invitación. Echando mano de nuestra imaginación, y con un poco de habilidad, podemos sorprender mucho a los invitados.
• Elige un lugar apropiado: una vez confirmados los invitados, piensa muy bien dónde será la fiesta. Si tu casa es muy pequeña, no dudes en buscar otra de algún amigo o familiar que sea más espaciosa, o incluso en la posibilidad de alquilar un local. También, si hace buen tiempo, es una excelente idea organizar el cumpleaños al aire libre, en un jardín, por ejemplo.
• No descuidar la seguridad: lo esencial es que los niños tengan espacio para jugar y disfrutar sin problemas, por lo que podemos habilitar dos zonas diferenciadas: una para la merienda, y otra para los juegos. También nos debemos asegurar de que es un lugar seguro, en el que los pequeños no estén expuestos a ningún riesgo.
• Pon esmero en la decoración: todo ha de estar decorado de forma divertida y colorida. Hay una enorme variedad de artículos de decoración: podemos optar por detalles temáticos (convertir la estancia en un barco pirata o en un castillo de princesas, por ejemplo), recurrir a guirnaldas, carteles, globos, farolillos, una piñata, o unos cuantos banderines personalizados; colocar motivos decorativos de los dibujos animados favoritos de nuestro hijo o, simplemente, sorprender con algún elemento original y práctico como un mural de fotos o una pizarra gigante donde los niños puedan dibujar lo que quieran, o escribir un mensaje para el pequeño cumpleañero.
• Prepara un detalle o regalo para los invitados: a los niños les encantará que les obsequiemos con algún detalle, como un paquete de golosinas o algún pequeño juguete. Si tenemos algo más de presupuesto podemos personalizar el regalito con el nombre del homenajeado.

Comida y juegos adecuados para cumpleaños infantiles

Lo ideal en las fiestas infantiles es ofrecer alimentos fáciles de comer, en pequeñas raciones, y que se puedan coger con los dedos, para que los niños puedan ir picando mientras están jugando. Hay sándwiches, canapés y chucherías (sin abusar de ellas) que les suelen gustar a la mayoría de los niños; siempre preparados con unas presentaciones atractivas y lo más caseras posibles.

Cuando vayas a elegir el tipo de comida para la celebración del cumpleaños de tu hijo, ten en cuenta las edades de los invitados (por ejemplo, hay que tener cuidado con los frutos secos porque pueden producir atragantamientos), y la hora a la que se celebra la fiesta. Además, infórmate de si hay algún niño con alergia o intolerancia a determinados alimentos.

Por último, escoge una mantelería y una vajilla desechables, decoradas de forma divertida, porque será lo más práctico y seguro para todos.

Y, por supuesto, ¡no te olvides de la tarta! Ya sea un pastel casero, en cuya preparación puedes controlar la cantidad de azúcar y en la que puede participar el niño, o uno más elaborado hecho por encargo, es uno de los elementos estrella de cualquier cumpleaños.

Si vais a celebrar el cumpleaños durante la pandemia, recordar ajustaros al número de personas permitido en cuanto a peques invitados y, a ser posible, que sean familiares cercanos o de sus respectivos grupos burbuja en clase. Y cómo no, mantener las medidas de seguridad necesarias, con dispensadores de jabón o gel hidroalcohólico relativamente a mano. 

Propuestas de juegos de cumpleaños para todos

Para que un cumpleaños infantil sea todo un éxito, lo más importante es que los niños se lo pasen en grande, y el mayor disfrute para ellos se lo proporciona el juego. Podemos organizar numerosos juegos y actividades, pero siempre teniendo en cuenta que todos los invitados de la fiesta deben participar, sentirse integrados, y no aburrirse. Por eso hay que planificarlos bien, adecuarlos a las edades de los asistentes y, en lo posible, abarcar un amplio abanico de gustos. Ten en cuenta que los niños más pequeños aún no están preparados para prestar atención durante un tiempo prolongado o para seguir reglas complicadas, y que les pueden asustar ciertas actividades como disfrazarse.

Ya a partir de los tres o cuatro años los juegos pueden ser más activos y participativos; y los niños de cinco años en adelante ya se entretendrán con la narración de un cuento o con una función de títeres, por ejemplo. Eso sí, este tipo de actividades nunca durarán más de media hora, para que los niños puedan seguir jugando.

Además, de vez en cuando reforzaremos los logros conseguidos por los pequeños y evitaremos que sean eliminados de los juegos, para que no se aburran ni se sientan excluidos de la fiesta. Y siempre ten en la recámara más juegos y actividades, por si hay que cambiar sobre la marcha.

Algunas ideas de juegos

No podemos dejar el tema de los juegos a la improvisación, sino que hay que tener preparados varios, que ocupen la mayor parte del tiempo de la celebración. Hay cientos de propuestas, pero aquí te apuntamos algunas:

• Juegos musicales: la música y el baile no pueden faltar, porque a los niños les suelen encantar. Podemos organizar un karaoke en el que actúen por grupos, alguna coreografía de baile, o el juego de las estatuas musicales, en el que tendrán que bailar y quedarse totalmente quietos cuando pare la melodía.
• Juegos clásicos: como la gallinita ciega, el corro de la patata, el pañuelo, o el juego de los oficios en el que, al ritmo de "me pongo de pie, me vuelvo a sentar, porque a los oficios vamos a jugar…", los niños van imitando diferentes profesiones. Seguro que con ellos triunfamos, porque son algunos de los preferidos por los peques de la casa.
• Manualidades: habilitaremos un rincón en el que puedan hacer varias manualidades con pinturas, plastilina, globos, abalorios, y otros tipos de materiales. Lo bueno de esta propuesta es que cada invitado se puede llevar lo que haya hecho de recuerdo. Aunque hay que estar atentos, porque no a todos los niños les gustan este tipo de actividades.
• Teatro: podemos preparar unos disfraces e invitar a los pequeños a que dejen volar su imaginación e inventen historias, a modo de teatro.

Cinco detalles clave en la celebración de un cumpleaños infantil

La celebración del cumpleaños de tu hijo es muy importante tanto para él, como para todos sus seres queridos, y se trata de momentos que recordará con agrado el resto de su vida, por ello, te explicamos cinco detalles clave para que todo salga bien en ‘su día’:

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  Una jornada especial

  Desde que se despierte, tu hijo será el protagonista de su día de cumpleaños, por lo que se tiene que sentir muy querido. Dadle los buenos días cantándole el cumpleaños feliz, desayunad todos juntos, dejad que elija la ropa que se va a poner y que haga las tareas del día sin prisas y sin agobios. Promueve que participe en los preparativos de la fiesta, pero sin saturarle de obligaciones.

  En estos momentos, en los que no podemos juntarnos con todas las personas que nos gustaría, dedicar un espacio para que pueda hablar y ser felicitado por teléfono o videollamda por aquellos amigos o familiares con los que no vayais a poder coincidir por distancia o seguridad.

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  Adecuar la fiesta a los niños

  La celebración se debe ajustar a los horarios de los niños; por la tarde, después de la siesta, puede ser el mejor momento. Y si la fecha del cumpleaños es en un día de diario, lo mejor es posponer la celebración infantil para el fin de semana, ya que los pequeños estarán menos cansados y disfrutarán más.

  Además, es preferible una fiesta breve, pero intensa. Unas tres horas de duración aproximadamente es lo más recomendable.

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  Una vigilancia constante

  Cuantos más invitados haya, más probabilidades existen de que algo salga mal. Especialmente en tiempos de pandemia por COVID-19, donde tendréis que limitaros a no sobrepasar el máximo permitido por las autoridades en cada momento y disponer en todo momento de los elementos de desinfección necesarios.

  Hay que organizar muy bien todo para controlar a los niños, tenerlos entretenidos, y que no ocurra ningún percance (¡aunque debes tener claro que seguro que algo se manchará o se romperá!). Si necesitas ayuda, pide a otros adultos que te apoyen. Es esencial tener los teléfonos de los padres de todos los niños invitados a la fiesta, por lo que pueda pasar.

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  Atención a los momentos clave

  Especialmente en estos instantes, pero por supuesto durante toda la celebración, ten a punto el teléfono móvil o la cámara de fotos para captar cada momento y cada detalle. Y una vez pasada la fiesta, preocúpate por recopilar todas las fotos que hayan hecho los demás invitados.

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  Haced un balance final

  Una vez que todo haya terminado y estemos más tranquilos, comentaremos con nuestro hijo lo estupenda que ha sido la fiesta, le pediremos que nos cuente cómo se lo ha pasado y qué es lo que más le ha gustado, y destacaremos lo bonito que ha sido cada regalo que le han hecho.