Cómo eliminar hongos en las uñas de los pies

Para eliminar los hongos en las uñas de los pies hay que atajar rápido el problema y no ocultarlo. Descubre a qué se debe su aparición y algunas recomendaciones para lograr que desaparezcan de forma efectiva.
Mujer con problemas de hongos en las uñas de los pies

Por: Caridad Ruiz

Periodista especializada en salud y nutrición

Actualizado: 21 de septiembre de 2022

Uñas engrosadas, de color amarillento o amarronado, que se rompen en pedazos en facilidad… son los síntomas más evidentes de padecer los molestos hongos. Para eliminar los hongos en las uñas de los pies hay que atajar el problema lo antes posible y nunca intentar ocultarlo, porque nunca se produce una curación espontánea, sin necesidad de productos sanitarios. Si cuando aparecen los primeros síntomas se sigue un tratamiento adecuado, la afección no irá a más y su solución será mucho más sencilla. Cuanto más tiempo se tarde en detener el avance de los hogos, más difícil serán de eliminar.

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Pero, además, es fundamental ser muy constante en el tratamiento para poder obtener buenos resultados. Aun cuando se observa que la infección comienza a mejorar, no hay que abandonar nunca el tratamiento antes de tiempo, porque es muy habitual que los hongos vuelvan a aparecer.

¿Por qué aparecen los hongos en las uñas?

La onicomicosis o infección por hongos en las uñas es un problema muy habitual. Aparece sobre todo en las de los pies, y se da con mayor frecuencia en hombres adultos. Los hongos dermotifitos suelen ser los causantes de esta patología que es muy contagiosa.

Andar descalzo

Existen diferentes causas que aumentan el riesgo de contraer la infección en las uñas:

  • Sudoración excesiva o hiperhidrosis en los pies: los hongos encuentran en la humedad su medio ideal para crecer.
  • Mantener los pies húmedos mucho tiempo.
  • Caminar descalzo en sitios públicos, como duchas, vestuarios o piscinas públicas. No llevar los pies bien protegidos facilita la infección por contagio.
  • Haber sufrido antes pie de atleta, es decir, haber tenido previamente hongos en la piel. En este caso, la infección puede extenderse a las uñas.
  • Tener un sistema inmunitario debilitado, bien por algunas enfermedades o por tratamientos médicos.
  • Padecer algunas patologías como la psoriasis o la diabetes, o tener problemas de circulación.
  • El envejecimiento: a medida que se cumplen años las uñas de los pies suele ser más frágiles y tienden a secarse y agrietarse, facilitando el paso de los hongos.

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Cómo eliminar los hongos en las uñas

Son varias las opciones de venta libre para el tratamiento de los hongos en las uñas. Tu farmaceuta podrá indicarte la mejor alternativa para tu caso en particular. Sin embargo, es importante tener en cuenta algunas recomendaciones para que el resultado sea efectivo:

  • Se debe seguir el tratamiento tal y como se indica en el prospecto del producto y durante el tiempo necesario.
  • Mantener muy limpia la zona donde se encuentra el hongo.
  • Usar calcetines que absorban el sudor, y si se notan húmedos, cambiarlos durante el día.
  • Elegir zapatos fabricados en piel que permitan la transpiración.
  • Deshacerse del calzado viejo o tratarlo con productos antifúngicos.
  • Esterilizar las tijeras o los alicates usados para cortar las uñas, y no usar los empleados para cortar uñas infectadas en las sanas.
  • También, hay que desinfectar todos aquellos artículos que hayan estado en contacto con los pies, como las toallas, las alfombras de baño…
  • No usar esmalte de uñas.

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Chanclas de playa para prevenir los hongos en los pies

Recomendaciones para prevenir los hongos en las uñas

Tratar con celeridad los hongos en las uñas de los pies es imprescindible para evitar que el hongo se propague a otras partes del cuerpo como las manos. Además, conviene seguir estos consejos para prevenir el contagio:

  • Mantener las uñas cortas.
  • Asear todos los días los pies con agua y jabón y secarlos muy bien, prestando mucha atención a los dedos y llegando a todos los pliegues.
  • Usar calcetines o medias de tejidos naturales, como el algodón, y cambiarlos cada vez que se humedezcan, o al menos una vez al día.
  • Evitar el calzado acabado en punta o apretado y confeccionado en material sintético.
  • Dejar que los zapatos se sequen al menos durante 24 horas.
  • No caminar descalzo por zonas comunes, como piscinas, saunas, vestuarios, duchas… En este tipo de instalaciones hay que usar siempre sandalias o chanclas.
  • No meter los pies durante mucho tiempo en agua caliente.
  • No compartir toallas o calcetines con otras personas.
  • Hidratar los pies todos los días.

Creado: 7 de febrero de 2019

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