Hábitos saludables para aliviar la pesadez de piernas
Actualizado: 27 de septiembre de 2022
Realizar algunos sencillos cambios en nuestros hábitos diarios nos puede ayudar a combatir la pesadez de piernas. Una dieta equilibrada es el primer paso para sentir alivio en las piernas cansadas. Es importante incluir alimentos ricos en fibra como son las frutas y las verduras, que, si además las elegimos bien (uvas tintas, fresas, naranjas ácidas, espinacas, remolachas, pimientos…), nos aportarán flavonoides, cuya acción vasoconstrictora y antiinflamatoria está científicamente demostrada.
Como tratamiento de apoyo, hay en las farmacias y herboristerías productos ricos en vid roja, rizoma, ginkgo biloba, castaño de indias o rusco, con acción antiinflamatoria e ideales para mejorar las paredes vasculares y disminuir los edemas asociados, como señala el Colegio de Farmacéuticos de Barcelona, quien insiste en que algunas de estas plantas pueden interaccionar con algún medicamento, por lo que es importante consultar con profesionales especializados en el tema.
Igual de importante es ingerir abundante líquido, medida también crucial cuando aumentan las temperaturas por el incremento de la sudoración y el riesgo de deshidratación. Lo mejor es tomar agua, pero siempre se puede combinar con zumos naturales o caldos fríos.
Actividades deportivas para aliviar la pesadez de piernas
Montar en bicicleta o nadar pueden ayudar también a las personas con problemas de pesadez de piernas, ya que se trata de dos ejercicios que potencian la musculatura de las extremidades inferiores. Si no te gusta ni el ciclismo ni la natación, tampoco tienes excusa, porque simple acto de andar es positivo para estimular la circulación sanguínea y mantener a raya los kilos de más que también perjudican el buen estado de las piernas. Si tienes la suerte de vivir en un lugar de playa o vas allí de vacaciones, pasea por la orilla del mar, ya que la acción de las olas golpeando en los tobillos o a media pierna aumentará el beneficio del paseo.
El verano también suele ser la época en la que más largos desplazamientos se hacen para poder disfrutar de las vacaciones. Un viaje largo en el que debamos pasar muchas horas sentados puede ser una tortura para las personas con problemas en sus piernas, por lo que debe tratar de hacer pausas de manera más habitual, moverse y estirarse, caminar un poco en los descansos o en el pasillo del avión o tren… todo ello para evitar un problema más grave: la trombosis venosa profunda, conocida también como el síndrome de la clase turista.
Creado: 18 de julio de 2012