Los expertos recomiendan viajar con un botiquín
03/08/2012
Llevar un botiquín con las cosas más necesarias siempre que salgamos de viaje ayudaría a evitar contratiempos de salud. Por ello, los expertos recomiendan que, con independencia del destino elegido, se añada siempre al equipaje un botiquín del viajero, especialmente si vamos acompañados de niños.
El botiquín debe incluir analgésicos, remedios contra la diarrea y el mareo, gasas, tijeras, suero fisiológico, un termómetro, repelente contra insectos y un antibiótico de amplio espectro, entre otras cosas básicas. Además, es conveniente llevar a mano lo más esencial, como los medicamentos que se toman habitualmente en caso de que el viajero sufra alguna enfermedad crónica y los analgésicos, y dejar en la maleta aquello que se usa solo esporádicamente.
Los trastornos más frecuentes en verano son las picaduras de insectos o de medusas, las diarreas y las deshidrataciones. En la playa es fundamental la protección solar, pero tampoco hay que olvidarla siempre que se permanezca al aire libre, aunque sea en el campo, la montaña, o en las visitas a ciudades, y proteger especialmente a los niños, para los que se aconseja emplear un protector solar pediátrico factor 50, explica el doctor José Cordero. Además, si se van a frecuentar playas en las que pueda haber medusas, se aconseja llevar suero fisiológico con el que lavar la herida si se produce un ataque, y también algún antihistamínico.
Cordero recuerda que hay que extremar las precauciones ante las subidas de temperatura para prevenir las deshidrataciones, disponer de suero oral y, si se sufre una deshidratación, preparar una limonada alcalina casera con agua mineral (un litro), dos limones exprimidos, un poquito de azúcar y otro de sal; un método rápido y sencillo para rehidratarse.
Es conveniente incluir en el botiquín de vacaciones un antibiótico de amplio espectro, sobre todo si salimos al extranjero
En cuanto a los medicamentos que debemos llevar, Cordero añade que, aunque no debemos automedicarnos, es preciso incluir en el botiquín un antibiótico de amplio espectro, lo que está especialmente indicado cuando viajemos al extranjero, pero comprobando primero no ser alérgico al medicamento.
Si se viaja a países cuyas condiciones sanitarias sean deficientes, el doctor recomienda solicitar primero información en los centros de vacunación internacional sobre las posibles vacunas necesarias y otras precauciones que se deben tomar antes, durante, y después del viaje. Así sabremos si es precisa la profilaxis contra patologías como la fiebre amarilla o la malaria.
Fuente: EUROPA PRESS
Actualizado: 1 de agosto de 2017