Higiene bucodental en adultos
Actualizado: 23 de octubre de 2023
La higiene bucodental en adultos es fácil de llevar a cabo, solo es cuestión de convertir en un hábito unas pautas sencillas, pero que a algunos les cuesta poner en práctica. Conoce las claves para mantener una sonrisa saludable.
Control mecánico de la placa dental
Para mantener a raya la placa dental hay dos técnicas que se deben dominar, el cepillado de los dientes y la limpieza interproximal. Así debes llevarlas a cabo:
Cepillado
Su efectividad depende de la minuciosidad y rigurosidad de los movimientos efectuados, más que de la elección de una técnica concreta. Salvo los casos que requieran una técnica determinada, actualmente se considera que la técnica personal de cepillado de cada paciente es la más efectiva para él, aunque el profesional puede verificar las posibles deficiencias que presenta su manera de cepillarse, y aconsejarle cómo mejorarla. En general, puedes utilizar movimientos suaves y circulares para cepillar todas las superficies de los dientes: la parte frontal, la trasera y las superficies de masticación. Recuerda cepillar también la lengua y las encías con suavidad para eliminar las bacterias. El tiempo óptimo de duración del cepillado se ha estimado en 2 minutos. Se deben cepillar también los carrillos, las encías, el paladar y limpiar la lengua para un completo control de la placa.
Algunas recomendaciones a tener en cuenta a la hora de elegir un cepillo son: cerdas suaves de punta redondeada y cabeza multipenacho situada en el mismo plano con el mango. Las cerdas duras producen lesiones traumáticas y recesiones gingivales.
Limpieza interproximal
Es de suprema importancia incorporar estas técnicas y métodos de limpieza interproximal a la higiene bucodental diaria. La limpieza de los espacios interproximales es eficaz para reducir la inflamación gingival y las caries interproximales. Hay que extremar la atención a la hora de usar la seda dental, ya que puede rasgar la papila interproximal (es decir, puede rasgar la encía). Por eso sería conveniente que el profesional enseñara la técnica correcta al paciente. Otros elementos de limpieza interproximal pueden ser cepillos interproximales, palillos de madera, cepillos unipenacho, estimuladores de caucho e irrigadores orales.
Control químico de la placa dental
Por otro lado, estas técnicas deben ir acompañadas de un buen dentrífico y un colutorio adecuado:
Dentífrico
Dependiendo del dentífrico, el objetivo primordial es proporcionar efectos beneficiosos que protejan contra la incidencia de enfermedades bucodentales, como la caries, mediante la incorporación del ion flúor al cristal de apatita del esmalte; la reducción de la hipersensibilidad dentaria; la enfermedad periodontal y la formación de cálculos. Los dentífricos se utilizan junto a los cepillos de dientes para limpiar las superficies accesibles de los dientes. También se usan los dentífricos como vehículo de ciertos agentes terapéuticos. La dosis usual en el adulto es de 1,5 mg de fluoruro.
Colutorio
Son sustancias de características parecidas a los dentífricos pero, a diferencia de ellos, al no ser usados con un cepillo, no van a poder eliminar la película dentaria. Sus objetivos son: complementar las medidas mecánicas de control de la placa bacteriana, mejorar la halitosis, y eliminar temporalmente el número de microorganismos que integran la microbiota bucal. Tras la utilización del colutorio, no debe enjuagarse la boca con agua u otro líquido al menos durante 30 minutos, ya que esto favorecería la eliminación del mismo, reduciendo su eficacia.
Otras recomendaciones a seguir en la higiene bucal del adulto
Además de la ya comentado, los adultos deben seguir las siguientes pautas para mantener una higiene bucodental efectiva:
- Limpieza de la lengua: utiliza un limpiador de lengua o el reverso del cepillo de dientes para limpiar suavemente la lengua y eliminar las bacterias y los restos de comida.
- Evitar el tabaco y el exceso de alcohol: el tabaco y el consumo excesivo de alcohol pueden tener un impacto negativo en la salud bucal. Reducir o eliminar estos hábitos puede mejorar la salud oral.
- Dieta saludable: mantén una dieta equilibrada con alimentos ricos en nutrientes y limita el consumo de azúcar, especialmente de alimentos y bebidas azucaradas.
- Visita con regularidad al dentista: programa visitas regulares al dentista, generalmente cada seis meses, o según las recomendaciones de tu profesional dental. Estas visitas son esenciales para exámenes regulares, limpiezas profesionales y detección temprana de problemas dentales.
- Presta atención a problemas dentales: si experimentas dolor dental, sangrado de las encías, sensibilidad u otros problemas, busca atención dental de inmediato en lugar de postergar la visita al dentista.
- Mantén una rutina consistente: la clave de una buena higiene bucal es la consistencia. Intenta llevar una rutina diaria de cuidado dental para mantener tus dientes y encías en óptimas condiciones.
Creado: 26 de noviembre de 2010