El abedul está considerado por los expertos como el gran aliado de nuestros riñones y tal vez uno de los mejores antisépticos herbarios con el que podemos contar. Los herbolarios lo incorporan en muchas de sus formulaciones fitoterapéuticas para tratar las dolencias que afectan a este órgano, esencial para el filtraje de toxinas y metales pesados y para facilitar su eliminación con la orina.
A las hojas del abedul se le atribuyen propiedades diuréticas, antisépticas a nivel urinario, febrífugas, antiinflamatorias, antirreumáticas, antihipertensivas, analgésicas, astringentes, hemostáticas, cicatrizantes, remineralizantes, vitamínicas y desintoxicantes.
A continuación te exponemos las principales indicaciones y beneficios para la salud del abedul:
- Se revela como un antiséptico urinario de primer orden, indicado en infecciones urinarias como la cistitis, la uretritis, la prostatitis.
- Previene la formación de piedras en el riñón y te ayuda a disolverlos o eliminarlos en una primera fase si ya los has desarrollado. Puede aliviar el dolor, a veces intenso, que provoca el cólico nefrítico, aunque será una solución complementaria.
- Muestra un gran poder antiinflamatorio, especialmente efectivo en caso de inflamación renal (pielonefritis).
- Te ayuda a eliminar el exceso de cloruros, urea y ácido úrico por la orina, despliega una notable acción depurativa y desintoxicante.
- Alivia el dolor provocado por la inflamación de las articulaciones, se muestra como un analgésico y antiinflamatorio eficaz en tratamientos de largo alcance de la artritis, la artrosis y la gota.
- El abedul es muy útil, como alternativa a los antipiréticos de síntesis, para bajar la fiebre en infecciones urinarias, hepáticas y digestivas.
- Estimula la emisión de orina, favorece la eliminación de toxinas, previene la retención de líquidos y se señala como terapia de apoyo contra el sobrepeso.
- Ayuda a controlar la tensión sanguínea.
- Reduce el dolor y la inflamación en contracturas musculares, tendinitis, fibrositis, bursitis y neuralgias.
- Se ha indicado como apoyo en el tratamiento natural de la fibromialgia.
- Alivia las cefaleas, y se impone como una alternativa interesante a los analgésicos y antiinflamatorios de síntesis (ibuprufeno).
- Se indica como solución natural para reducir los estados febriles y aliviar el trancazo en procesos gripales, resfriados y alergias respiratorias.
- Por su efecto astringente y antidiarreico, te ayuda a combatir la diarrea y los cólicos.
- En uso externo, se prescribe sobre dolores osteoarticulares, sobre eccemas, forúnculos, urticarias, picaduras de insectos y abscesos.
- Se ha indicado como antiinflamatorio en caso de cervicitis o inflamación uterina.
- Fortalece las raíces del cabello y previene su caída prematura. En tal caso se aplica en forma de loción.
- La savia de abedul se prescribe como depurativo, para tratar la litiasis renal (piedras) y en curas desintoxicantes y como apoyo en tratamientos de ayuno.