Aplicaciones beneficiosas de la manzanilla para la piel
Actualizado: 2 de marzo de 2023
Aunque tenemos muy asociado el recurrir a la manzanilla en forma de infusiones para, sobre todo, aliviar problemas digestivos, lo cierto es que, debido a sus propiedades antisépticas y antiinflamatorias, la manzanilla también puede aplicarse sobre la piel para tratar diversos problema dermatológicos, entre otros:
Estas propiedades beneficiosas de la manzanilla se obtienen cuando se aplica a través de geles y ungüentos compuestos a base de camomila.
Al ser una planta rica en mucílagos –fibras solubles–, se utiliza en la preparación de productos destinados a curar cortes, heridas, granos de acné, orzuelos o la dermatitis. También puede aplicarse humedeciendo compresas o gasas en una infusión de manzanilla y dejando sobre la zona afectada durante unos 15 minutos.
Manzanilla para calmar el acné
La manzanilla es un remedio natural que puede ayudar a reducir la inflamación y calmar la piel irritada causada por el acné. Para usar la manzanilla como tratamiento para el acné, sigue los siguientes pasos:
- Hierve una taza de agua y agrega 2 bolsitas de té de manzanilla. Déjalo enfriar.
- Aplica el té de manzanilla tibio sobre las áreas afectadas con un algodón o un paño suave.
- Deja que la manzanilla se seque en la piel durante 15 a 20 minutos.
- Lava tu cara con agua tibia y sécala suavemente.
- También puedes mezclar la manzanilla con otros ingredientes, como el aceite de árbol de té o el aceite de lavanda, para un tratamiento más efectivo. Es importante probar primero en una pequeña área de la piel para asegurarte de que no tengas una reacción alérgica.
Manzanilla para reducir un orzuelo
En el caso de los orzuelos, la manzanilla tiene propiedades antiinflamatorias y antibacterianas que pueden ayudar a reducir la hinchazón y combatir las bacterias que pueden causarlos. Para usar manzanilla para tratar los orzuelos, puedes hacer una infusión de manzanilla y aplicarla sobre la zona afectada con una bola de algodón o un paño suave. También puedes hacer compresas con infusión de manzanilla caliente y colocarlas sobre los ojos durante 10 a 15 minutos.
Manzanilla para el cuidado del cabello
Otro uso muy extendido de la manzanilla es en la elaboración de champús, tanto para aliviar picores y la descamación como en los tintes, ya que tradicionalmente se ha empleado para conseguir colores dorados en el pelo rubio o para aportarle más brillo.
La manzanilla se usa en la elaboración de champús por sus propiedades calmantes y suavizantes. Además, también es un ingrediente que ayuda a mantener el cabello suave y sedoso. La manzanilla contiene compuestos como bisabolol y ácido ascórbico que tienen propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, lo que ayuda a reducir el enrojecimiento y la irritación del cuero cabelludo. Además, también puede ayudar a equilibrar el pH natural del cabello y el cuero cabelludo.
Su aceite esencial está presente en aromatizantes y potenciadores del sabor. De igual forma, se emplea en la elaboración de cosméticos, perfumes, jabones o, incluso, en los cigarrillos.
Manzanilla para la descongestión nasal
De igual forma, los baños de vapor o las inhalaciones son de gran ayuda para aliviar la inflamación de los senos nasales. Para hacerlas de forma correcta, hay varias opciones:
- Hierba seca: llena un recipiente con agua caliente y añade un puñado de flores secas de manzanilla o camomila. Cubre tu cabeza con una toalla y respira los vapores durante 10 a 15 minutos.
- Té: haz un té fuerte con manzanilla o camomila y déjalo enfriar. Luego, respira los vapores con una toalla cubriendo la cabeza.
- Bolsa de inhalación: añade agua caliente y una cucharada de manzanilla o camomila seca a una bolsa de inhalación. Colócate la bolsa sobre la nariz y respira los vapores.
Es importante asegurarse de que el agua esté caliente, pero no caliente al punto de quemarse. También es recomendable realizar esta acción varias veces al día para obtener los mejores resultados.
Manzanilla para problemas reumatológicos
En los casos de reúma y artrosis también pueden realizarse masajes en la zona afectada con un preparado casero realizado a base de plantas de manzanilla romana y de aceite de oliva. Para ello, puedes seguir los siguientes pasos:
- Infusión de manzanilla: hierve agua y añade 2-3 cucharaditas de flores secas de manzanilla. Deja reposar durante 10 minutos y cuela.
- Mezcla de aceite: mezcla 2-3 cucharadas de la infusión de manzanilla con 2-3 cucharadas de aceite de oliva.
- Aplicación tópica: aplica la mezcla resultante sobre la articulación afectada empleando para ello un paño suave mojado en la infusión, y frota suavemente durante unos minutos.
Es importante que realices este procedimiento varias veces al día para obtener un alivio efectivo. Además, recuerda que es recomendable hablar con tu médico antes de comenzar cualquier tratamiento con manzanilla o cualquier otro tratamiento natural, especialmente si estás tomando algún medicamento o tienes alguna afección médica subyacente.
Creado: 18 de octubre de 2011