El consumo de regaliz es seguro en términos generales, tanto como alimento, como también en forma de remedio herbario, pero existen excepciones notables en las que cabe ser muy prudente a la hora de tomarlo, o incluso puede llegar a estar desaconsejado, tal y como se advierte en un estudio publicado en Endocrinology and Metabolism. A continuación, te explicamos cuáles son las principales contraindicaciones del regaliz:
- Su toma de forma abusiva o prolongada puede reducir los niveles de potasio y aumentar por contra los de sodio, lo cual supondría un grave riesgo para personas hipertensas o con alguna enfermedad renal grave. Puede llegar a inhibir la actividad enzimática que actúa en el riñón, interfiriendo sobre las hormonas que regulan la concentración de electrolitos de sodio, potasio y cloruros, conduciendo a la larga a un proceso de hipopotasemia o niveles bajos de potasio en sangre, lo que empeora notablemente el cuadro de hipertensión arterial. Por ello, se recomienda consumirla con moderación en caso de hipertensión leve, y evitarla en caso de hipertensión alta o muy alta.
- A consecuencia de lo anterior, el abuso del regaliz también puede ocasionar edemas, calambres y debilidad muscular en los afectados.
- Dosis altas de glicirrina –uno de sus principios activos– pueden, por tanto, elevar la presión arterial, provocar alteraciones del ritmo cardíaco y problemas renales. Por ello, el regaliz está desaconsejado en caso de insuficiencia cardiaca y renal.
- No se recomienda tomar regaliz o paloduz en el embarazo, ni en el periodo de lactancia.
- Se advierte que puede llegar a interferir con algunas medicaciones, como la insulina en tratamientos para diabéticos, la digoxina o la furosemida, y similares.
Se recomienda no sobrepasar la dosis recomendada o máxima de regaliz, que es de 1 a 4 gramos al día
- Su administración es compatible, sin embargo, con corticoides y antidepresivos inhibidores de la monoamino oxidasa, aunque es prudente consultar con el médico especialista si se da el caso.
- Los expertos advierten que las dosis por encima de los 50 gramos al día –unos 100 mg de glicirrina– y repetida durante periodos de seis o más semanas, son inseguras y no exentas de intoxicación grave. No obstante, no es fácil que se llegue a consumir tal cantidad de regaliz, y menos a base de barritas o infusión, y cabe ser prudente con la toma de caramelos o pastillas. La dosis recomendada es de 1 a 4 gramos al día.
- Se debería consultar con el médico si se están siguiendo tratamientos farmacológicos para la diabetes, estrógenos, medicamentos hepáticos, corticoesteroides como la cortisona –el regaliz podría aumentar sus niveles en sangre–, antiplaquetarios y anticoagulantes como la warfarina, glicósidos cardiacos –el paloduz podría acentuar sus efectos–, y otros medicamentos interferidos por el potasio.
Cabe añadir que el regaliz que se vende en mercados para su uso en la alimentación suele tener un contenido en glicirrina reducido, a fin de evitar riesgos innecesarios.