La moringa es un árbol que ofrece valiosos recursos nutricionales y energéticos, y destaca por sus propiedades medicinales, desde combatir la fatiga, el colesterol o procesos inflamatorios a evitar las infecciones.
Propiedades de la moringa: 22 beneficios para la salud
La moringa se ha utilizado desde antiguo en la práctica ayurveda india para el alivio de hasta 300 dolencias distintas; unas aplicaciones que en buena parte han merecido la confirmación de recientes estudios clínicos, aunque queda mucho por explorar. Destaca como un potente aporte nutricional y energético, con propiedades antioxidantes, antiinflamatorias, antihistamínicas, antibacterianas, hipolipemiantes, hipoglucemiantes, eupépticas (favorece ladigestión), emolientes, dermoprotectoras, y antifúngicas.
PUBLICIDAD
Las principales indicaciones y beneficios de la moringa para la salud son las siguientes:
Los extractos de sus hojas y semillas muestran una intensa capacidad antioxidante, muy útil para frenar la acción de los radicales libres y para evitar las infecciones. Se le atribuye, por tanto, un efecto preventivo. Puede detener o demorar el estrés oxidativo que afecta a las células de diferentes órganos del cuerpo.
Tiene una alta capacidad antiinflamatoria, mostrándose efectiva en el tratamiento de afecciones crónicas como la diabetes, la artritis y la artrosis, pero también en inflamaciones digestivas, hepáticas y renales. Los extractos concentrados de hojas de moringa han demostrado su capacidad para revertir la inflamación de los tejidos.
Combate los síntomas de los procesos alérgicos, te ayuda a desinflamar las mucosas del tronco respiratorio. La moringa oleifera está indicada en alergias respiratorias, alergias por contaminantes y por intolerancias alimentarias, procesos asmáticos, que cursan con rinitis, conjuntivitis, laringitis o bronquitis.
PUBLICIDAD
Las hojas se usan como laxante y como purgante en estreñimientos crónicos o severos.
Favorecen la emisión de orina, alivian la inflamación del riñón y la que se presenta en las vías urinarias como la vejiga, y previene la retención de líquidos y los edemas.
Ejerce un efecto protector y desintoxicante sobre el riñón, por cuanto contribuye a atenuar el daño generado por agentes tóxicos, como es el caso de algunos medicamentos y metales pesados. La moringa favorece la eliminación vía orina de estas toxinas.
Ciertos estudios señalan su capacidad para reducir las tasas de azúcar en sangre y orina. Han demostrado, además, que puede mejorar los niveles de hemoglobina y proteína en pacientes con diabetes.
Ejerce un efecto reparador sobre las células hepáticas, incrementando el contenido en proteínas, restaurando los niveles de enzimas hepáticas, y reduciendo la inflamación. Un hígado tonificado garantiza el buen funcionamiento de la digestión y la metabolización de los nutrientes.
Se ha usado el marango, mezclado con otras hierbas, para combatir la inflamación de las mucosas de los conductos digestivos, en colitis ulcerosas, gastroenteritis y gastritis.
PUBLICIDAD
Muestra una potente acción antibacteriana, lo que impide el desarrollo y propagación de determinados agentes patógenos, como las bacterias Helicobacter pylori, E. coli, o la salmonella, y te ayudará a combatir sus síntomas como la diarrea.
La moringa oleifera es una planta energética; potencia la producción de glóbulos rojos y nos proporciona vitaminas esenciales. Supone un aporte de vitalidad y energía, útil para afrontar estados de debilidad y fatiga. Está ciertamente indicada a excursionistas, alpinistas, deportistas, etcétera.
Por la presencia de flavonoides con un alto poder antioxidante, como el kaempferol y la quercetina, los extractos de moringa se han ensayado en el tratamiento coadyuvante de diversos tumores, como el de ovarios o el de hígado.
También se han ensayado los extractos concentrados de moringa para evaluar su posible incidencia sobre determinados neurotransmisores, como la serotonina y la noradrenalina, a fin de conocer su eficacia en enfermedades de tipo neurodegenerativo como el alzhéimer.
Se le atribuye al marango una notable acción antifúngica y antiparasitaria, útil para tratar las infecciones por hongos como la del género Aspergillus, y para favorecer la eliminación de parásitos intestinales.
Por su riqueza en vitamina A, se ha destinado a fortalecer la visión y a combatir la ceguera, con resultados inciertos.
El fruto de moringa, pobre en grasas, ayuda a combatir el sobrepeso y favorece la buena asimilación de los nutrientes.
El jugo de las hojas tiene un alto valor antiséptico. Se ha usado para curar y cicatrizar heridas, llagas, arañazos y picaduras de insectos.
El aceite de moringa tiene efectos emolientes, nutritivos e hidratantes sobre la piel. Se destina al cuidado de pieles envejecidas, afectadas por el contacto de sustancias corrosivas, por quemaduras y escaldaduras (accidentes caseros).
Las hojas crudas se han usado en cataplasmas para aliviar las cefaleas.