Causas del cáncer de ovario
No se conocen las causas del cáncer de ovario, aunque sí se ha observado que existen una serie de factores que predisponen a una mujer a desarrollar este tipo de cáncer, mientras que otros factores disminuyen el riesgo de padecer la enfermedad.
Los principales elementos que influyen en su desarrollo son:
- Mutaciones genéticas: el cáncer de ovario a menudo está vinculado a mutaciones genéticas heredadas. Las mutaciones en los genes BRCA1 y BRCA2 son las más comúnmente asociadas con un riesgo elevado de cáncer de ovario. Estos genes normalmente ayudan a reparar el daño del ADN y prevenir el crecimiento anormal de las células; cuando están mutados, el riesgo de cáncer aumenta.
- Cambios celulares: en muchos casos, las células en los ovarios desarrollan cambios en su ADN. Estos cambios pueden no ser heredados pero ocurren a lo largo de la vida de una persona. Aunque la causa exacta de estos cambios es a menudo desconocida, pueden llevar al crecimiento incontrolado de células que resulta en cáncer.
Factores de riesgo del cáncer de ovario
- Teoría de la ovulación incesante: el traumatismo-rotura que se produce durante cada ovulación para que salga el óvulo del ovario puede resultar un estímulo para la aparición del cáncer de ovario. Por este motivo, las mujeres sin descendencia corren un riesgo mayor, ya que la gestación supone un período de reposo ovulatorio, y aquellas que no han estado embarazadas habrán sufrido un mayor número de ovulaciones.
- Historial familiar: aparece con mayor frecuencia en aquellas mujeres con una historia familiar de cáncer de ovario. Así, tener un familiar de primer grado (madre, hermana, hija) con cáncer de ovario aumenta el riesgo de una mujer.
- Genético: se ha observado que el 30% de los cánceres de ovario expresan niveles elevados de determinadas mutaciones genéticas, sobre todo en los genes BRCA1 y BRCA2.
- Edad: a mayor edad, mayor riesgo. La mayoría de los cánceres de ovario se desarrollan después de la menopausia, siendo más comunes en mujeres de más de 50 años.
- Historia reproductiva y menstrual: las mujeres que comenzaron a menstruar a una edad temprana o entraron en la menopausia a una edad más tardía, o aquellas que nunca han dado a luz, pueden tener un riesgo ligeramente mayor.
- Terapia de reemplazo hormonal: el uso prolongado y reciente de terapia de reemplazo hormonal después de la menopausia ha sido asociado con un mayor riesgo de cáncer de ovario.
- Obesidad y estilo de vida: la obesidad puede aumentar el riesgo de muchos tipos de cáncer, incluido el cáncer de ovario. Un estilo de vida sedentario también puede contribuir a este riesgo.
- Endometriosis: las mujeres que tienen endometriosis, una condición en la que el tejido que normalmente reviste el interior del útero crece fuera de él, pueden tener un riesgo aumentado de cáncer de ovario.
Aunque no existe una manera segura de prevenir el cáncer de ovario, entender y mitigar los factores de riesgo puede ayudar. Además, para aquellas con un alto riesgo genético, opciones como la cirugía preventiva (salpingo-ooforectomía profiláctica) pueden considerarse. La detección regular a través de exámenes pélvicos, ultrasonido transvaginal, y pruebas de marcadores tumorales como el CA-125 pueden ser recomendadas para mujeres en alto riesgo.
Es crucial que las mujeres discutan su riesgo individual y opciones de seguimiento con su médico, especialmente si tienen antecedentes familiares de cáncer de ovario o mutaciones genéticas conocidas.
Factores protectores del cáncer de ovario
Aunque el cáncer de ovario puede ser una enfermedad desafiante, existen varios factores que pueden ayudar a reducir el riesgo de desarrollarlo:
- El síndrome de ovario poliquístico (SOP), ya que esta afección impide que se produzca la ovulación en las mujeres afectadas por este trastorno.
- Los anticonceptivos orales; al tomar anticonceptivos hormonales se evita la ovulación. El uso de la píldora anticonceptiva ha demostrado ser uno de los factores protectores más fuertes contra el cáncer de ovario. Las mujeres que usan anticonceptivos orales durante varios años pueden reducir su riesgo de desarrollar cáncer de ovario hasta en un 50%. Este efecto protector parece aumentar con la duración del uso y puede persistir durante muchos años después de dejar de tomar la píldora.
- La ligadura de trompas(esterilización) y la histerectomía (la extirpación del útero sin eliminar los ovarios) causan una disminución de la ovulación al alterarse la vascularización de la zona. Estos procedimientos quirúrgicos han sido asociados con un riesgo reducido de cáncer de ovario. Sin embargo, conllevan sus propios riesgos y deben considerarse cuidadosamente.
- Los embarazos y la lactancia: tener uno o más embarazos a término se asocia con un menor riesgo de cáncer de ovario. La lactancia materna también puede reducir el riesgo, y este efecto parece ser más fuerte cuanto más tiempo se amamanta.
- Estilo de vida saludable: mantener un peso saludable y adoptar una dieta rica en frutas, verduras y fibra puede ayudar a reducir el riesgo de muchos tipos de cáncer, incluido el cáncer de ovario. La actividad física regular también se ha asociado con un riesgo reducido.
- Evitar la terapia de reemplazo hormonal: limitar o evitar el uso de terapia de reemplazo hormonal después de la menopausia puede reducir el riesgo de cáncer de ovario, especialmente si la terapia se ha usado a largo plazo.
- Salpingo-ooforectomía profiláctica: en mujeres con un alto riesgo genético (por ejemplo, portadoras de mutaciones en BRCA1 o BRCA2), la extirpación quirúrgica de los ovarios y las trompas de Falopio puede reducir drásticamente el riesgo de desarrollar cáncer de ovario. Esta es una decisión significativa que debe tomarse con un cuidadoso asesoramiento genético y consideración de otros factores de salud personales.
Estos factores protectores no garantizan que una mujer no desarrollará cáncer de ovario, pero pueden ser parte de una estrategia para reducir el riesgo. Es esencial que las mujeres discutan estas opciones con su médico para entender su propio riesgo y considerar las mejores prácticas preventivas según su situación personal.