ASMR, estímulos que inducen orgasmos cerebrales
Actualizado: 5 de mayo de 2023
Ver, oír o sentir algunos estímulos puede hacer que nuestro cuerpo reaccione con un pequeño hormigueo que suele comenzar en la zona de la nuca y extenderse por el cuello y extremidades, generando una sensación de placer. Se trata del fenómeno viral que está llenando las redes, el ASMR (Autonomous Sensory Meridian Response) o respuesta de meridianos sensoriales autónomos. Te contamos cómo se activa y por qué desencadena los denominados orgasmos cerebrales.
Escuchar el ruido que hace una esponja, una cremallera o un susurro, tocar una manta suave o ver a alguien cortar el pelo puede desencadenar este escalofrío placentero
El origen del término ASMR surgió en 2010 en una página de Facebook en el que un grupo de personas describía los estímulos con los que llegaban a este estado mental de placer y relajación. Desde entonces YouTube se ha plagado de vídeos sobre esta temática que acumulan millones de reproducciones, e incluso han aparecido youtubers especializados en ello, como la española Ana Muñoz, cuyo canal cuenta con más de 1,32 millones de suscriptores. También se han multiplicado las playlist de Spotify dedicadas a los sonidos ASMR.
Cómo se produce el ASMR
Al parecer, según nos explica Laura Palomares, directora de Avance Psicólogos, la respuesta de meridianos sensoriales autónomos se puede activar ante estímulos táctiles, visuales, auditivos, o una combinación de ellos, aunque lo más común es que se produzca mediante el oído. Escuchar, por ejemplo, el ruido que hace una esponja, un papel, una cremallera o un susurro, aunque sean palabras ininteligibles, puede desencadenar ese escalofrío placentero. Pero, ¿qué dice la ciencia sobre el ASMR?
La reacción que genera este orgasmo se produce en el cerebro. “Nuestro cerebro está programado para buscar el placer y reproducirlo para sentir bienestar y felicidad. Cuando algo estimula los centros del placer de nuestro cerebro, segregamos dopamina, un neurotransmisor encargado de generar la sensación de bienestar” nos aclara Laura Palomares. “El placer es un aprendizaje: primero experimentamos algo que nos gusta y a continuación lo asociamos a datos que vienen del exterior, elementos sensoriales externos, cosas que oímos, vemos o percibimos a través del tacto, etcétera, y esto es lo que ocurre con el ASMR, una respuesta de placer provocada por las dopaminas segregadas ante estímulos sonoros o visuales agradables”.
“El ASMR es una respuesta de placer provocada por las dopaminas segregadas ante estímulos sonoros o visuales agradables”
Según un estudio, publicado en la revista Social Neuroscience, las personas que presentaron ASMR tenían una mejor conectividad funcional y un aumento de las conexiones entre la corteza occipital, temporal y frontal –relacionadas con el descanso y la relajación– con respecto a los que no.
Otra investigación, publicada en PLOS One, alertaba de que no se trata tan solo de una sensación de corta duración, sino que también tiene efectos fisiológicos en las personas que lo experimentan. Este es precisamente uno de los reclamos de los vídeos que circulan por internet, en los cuales se promete luchar contra el insomnio o provocar una relajación con los sonidos que reproducen, de ahí que mucha gente los busque como una ayuda para dormir. En el estudio se encontró que ver vídeos de ASMR puede reducir la frecuencia cardiaca 3,14 latidos por minuto en promedio.
Qué tipo de estímulos pueden provocar el ‘orgasmo cerebral’
Los detonantes de esta sensación placentera pueden ser muy dispares, pues a cada persona puede parecerle relajante una u otra cosa. Algunos de los más frecuentes son:
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Sonidos
Como una voz suave, ruido blanco, un susurro (whisper), patrones de sonidos como el paso de páginas al mismo ritmo, el golpeteo con las uñas o yema de los dedos sobre un objeto (tapping) o el rascado de la superficie (scratching)… En general, todos aquellos sonidos suaves, monótonos o que nos evoquen un momento de relax asociado al sonido.
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Imágenes
Ver a una persona pintar, hacer manualidades, cortar el pelo a otra, trocear frutas, doblar toallas… puede hacer que nuestro cerebro responda con una sensación placentera Las acciones que más ASMR provocan son aquellas que se realizan con movimientos suaves o que requieran de cierta destreza en su ejecución.
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Tacto
Al tocar ciertos objetos y sus materiales se puede disparar la respuesta de meridianos sensoriales autónomos. Por ejemplo, tocar una manta suave de pelo, que alguien nos toque el cabello o nos acaricie la piel o usar un masajeador de cabeza puede provocar en la persona esa sensación de bienestar y relajación.
Un estudio, publicado en Peer-Reviewed & Open Access analizó cuales eran los detonantes del ASMR en un grupo de 475 personas consumidoras de este tipo de vídeos y encontró que el 75% destacó los susurros como disparador del orgasmo cerebral, el 64% señaló los sonidos crujientes, el 36% los movimientos repetitivos y al 2% les provocaba ASMR el sonido de la aspiradora o de la risa.
¿Quién puede experimentar ASMR?
La psicóloga Laura Palomares nos responde que aún no hay las suficientes investigaciones científicas como para poder sacar conclusiones, y también nos advierte que hay que tener en cuenta que son experiencias subjetivas. “Sabemos que es habitual tener este tipo de ‘sensaciones sinestésicas’, por decirlo de algún modo, y que la reacción no es igual para todos, puesto que no todas las personas son capaces de sentir y reaccionar de manera similar ante los mismos estímulos”.
Ver vídeos de ASMR puede reducir la frecuencia cardiaca 3,14 latidos por minuto en promedio
Una investigación llevada a cabo por miembros de la Universidad de Winnipeg (Canadá) y la Universidad Metropolitana de Manchester (Reino Unido) observó que aquellas personas que sienten el ASMR tienen valores más altos en inestabilidad emocional (neuroticismo) y en la apertura a nuevas experiencias. Por otro lado, tienen peores valores en amabilidad, extroversión y responsabilidad.
Por último, un trabajo publicado en la revista PLOS One, reconoce que las personas que no sienten la respuesta de meridianos sensoriales autónomos no serán capaces de tener esta sensación placentera por mucho que lo intenten.
¿El ASMR puede generar adicción?
Como con toda sensación agradable surge la duda de si ver vídeos de ASMR puede provocar algún tipo de adicción. Al parecer, y según nos ha aclarado Laura Palomero de Avanza Psicólogos, no cree que llegue a tanto como una adicción, sino que lo que puede ocurrir es que las personas traten de volver a experimentar esta sensación viendo vídeos. Esta experta opina que cómo se utilice y si se hace de forma compulsiva o no, depende más de rasgos de personalidad individuales.
Creado: 13 de octubre de 2020