Cold brew coffee, cómo preparar el café en frío
Actualizado: 23 de julio de 2024
El café es la gasolina que necesitan muchas personas para ponerse en marcha, pero aunque sea un clásico, cada vez surgen más formas de prepararlo que hacen que su sabor o su intensidad sean diferentes, como es el caso del café Dalgona o del tan de moda cold brew coffee. Este último se ha hecho viral especialmente por su principal característica, y es que se hace infusionado con agua fría, una buena opción para disfrutar de esta bebida en verano y refrescarnos con ella.
Qué es el cold brew coffee
El cold brew coffee está cada vez más presente en las cartas de las cafeterías, especialmente en Estados Unidos, Inglaterra y Australia. Es una bebida de café que se prepara mediante la infusión de café molido en agua fría durante un período prolongado, por lo general entre 12 y 24 horas, y tiene una mayor concentración de cafeína. Aunque el aspecto es el mismo que el de un café convencional, quienes lo han probado dicen que es más suave, menos ácido y tiene hasta un 60% menos amargura, lo que lo hace ideal hasta para los paladares más delicados.
Se cree que su origen, lejos de ser actual, se podría remontar al siglo XVII en Japón, donde se conocía como "Kyoto-style coffee" o "Kyoto drip". Este método utilizaba una técnica de goteo lento, en la que el agua fría se filtraba a través de los posos de café durante varias horas. Posteriormente, en Cuba y otros países de América Latina, también se preparaba café con métodos de infusión en frío, aunque a menudo se mezclaba con azúcar para crear una bebida más dulce y concentrada. No obstante, tal como se conoce hoy en día el cold brew coffee se podría decir que empezó a popularizarse hace unos 15 años al otro lado del Océano Atlántico, en Estados Unidos, para después llegar a Europa y a Australia.
Beneficios del cold brew coffee
La preparación de este café frío difiere bastante de la tradicional, tanto en la temperatura del agua como en el tiempo de reposo, que puede durar hasta un día entero. Normalmente el café se hace con agua caliente para que extraiga todo su sabor en el menor tiempo posible, pero la infusión con agua fría también puede conseguirlo, aunque deberás tener algo más de paciencia.
El café hecho en frío tiene menos antioxidantes que el caliente, pero también contiene antioxidantes potentes como el ácido cafeoilquínico
La principal ventaja de este tipo de café es que, al estar frío, puede ser más refrescante que el caliente. Por otro lado, también puede aportar todos los beneficios de la cafeína, como aumentar la atención, la concentración o la energía. Además, bebiendo este café frío también se puede evitar el reflujo ácido que genera su versión caliente en algunas personas.
El café contiene poderosos antioxidantes como polifenoles, hidroxicinamatos y ácido clorogénico. Un estudio publicado en la revista Scientific Reports, reveló que el café caliente contiene más antioxidantes totales que las variedades de café frío, aunque este último presenta algunos antioxidantes muy potentes, como el ácido cafeoilquínico, que suele usarse para tratar enfermedades como el cáncer, la infección por VIH y el herpes.
Otro de los puntos a favor del cold brew coffee es que al usar agua fría el grano de café molido no sufre los efectos del calor extremo, dando como resultado una bebida más suave, naturalmente dulce –lo que ayuda a prescindir del azúcar o edulcorantes–, y con aromas diferentes.
Niveles de cafeína del cold brew coffee
¿Tiene el cold brew coffee las mismas cantidades de cafeína que el café convencional? Para responder a esta pregunta un grupo de investigadores de la Universidad Thomas Jefferson (EE.UU.) realizaron un estudio concreto en el que se analizaban los efectos del tiempo, la temperatura y el tamaño del molido en las concentraciones de cafeína de los cafés preparados en frío o cold brew coffee.
El trabajo destacaba que un café hecho con agua fría suele tener en torno a 200 mg de cafeína por cada 473 ml de la bebida, aunque esto no es una ciencia exacta, pues variará en función del tipo de café usado. Encontraron que el agua caliente extrae más cantidad de cafeína de los granos de café, sin embargo, el tiempo que está sumergido en agua también hace que los granos suelten más cafeína.
Un cold brew coffee suele tener unos 100 mg de cafeína por cada taza, mientras que un café convencional infusionado en agua caliente tiene 95 mg
En base a todo esto, se podría decir que el cold brew coffee, tiene ligeramente más cafeína que el convencional. Una taza promedio de café infusionado en caliente tiene unos 95 mg de cafeína, mientras que una del café hecho en frío tendría unos 100 mg, una diferencia muy baja.
Cómo preparar en casa cold brew coffee
Si te has convencido y quieres probar este tipo de café infusionado en agua fría, te voy a dar otro motivo para que le des una oportunidad, y es que debes saber que, aunque tenga toques distintos, su elaboración sigue siendo sencilla y la puedes hacer en casa; ahí va la receta casera del cold brew coffee.
Receta de cold brew coffee
Preparar un cold brew coffee en casa es muy sencillo y no necesitas ni muchos ingredientes, ni grandes aparatos. Además de la base del café, que es café molido grueso –similar a la utilizada para la prensa francesa, mejor si es de alta calidad– y agua fría, también deberás tener dos recipientes de cristal, uno para hacer la mezcla y otro para guardar el contenido final, y un colador o una gasa con los que evitarás los posos. Las proporciones café-agua tienen que ser de 1:4, es decir, por una medida de café tendrás que echar cuatro veces de agua.
- 250 g de café en grano de tueste natural y molido medio-grueso
- 1 litro de agua fría, que puede ser mineral o del grifo, aunque mejor si es de calidad
- Coloca el café en un recipiente de cristal con tapa hermética.
- Vierte el agua fría dentro del bote donde está el café.
- Remueve bien, cierra la tapa y agita para que los granos de café se mezclen bien con el agua.
- Ya estaría listo; ahora solo hay que dejar que repose entre 12 y 24 horas, aunque se puede acortar a 8 horas si se tiene algo más de prisa. Asegúrate de que esté a temperatura ambiente, en un lugar fresco, seco y lejos de fuentes de calor o de la luz directa del sol.
- Pasado ese tiempo, coge el segundo bote de cristal y coloca un filtro o una gasa tipo muselina y ve colando el café. Una vez esté todo, solo tienes que cerrar y volver a enfriar antes de servir. También puedes añadirle hielo, calentarlo, o añadirle leche o nata.
Diferencia entre el cold brew coffee y el café con hielo
Aunque se prepare en frío y se le pueda añadir hielo, es importante diferenciarlo del típico café con hielo (iced coffe), que consiste en café caliente preparado a la manera tradicional, como la cafetera de goteo, la prensa francesa o el espresso, y que se traslada a un vaso con estos cubos enfriadores. Y su tiempo de preparación es mucho más rápido. El sabor del café con hielo es ácido y amargo, aunque ligero, ya que se diluye con el hielo derretido. El cold brew es diferente, un café ligero, con un color algo más claro, pero con matices que le dan un toque muy especial, menos ácido y más suave, con un perfil de sabor más redondeado.
Este tipo de café puede conservarse en la nevera durante unas dos semanas, después de ese tiempo puede empezar a perder propiedades y sabor. Otra buena idea es congelarlo en cubitos de hielo para usarlo en otras elaboraciones.
Creado: 12 de agosto de 2022