Dormir con ventilador o aire acondicionado, ¿es malo?
Actualizado: 5 de mayo de 2023
Las temperaturas elevadas pueden hacer que conciliar el sueño se convierta en todo un reto, especialmente durante las olas de calor que estamos sufriendo este verano, y por ello muchos echan mano de ventiladores –de pie o de techo–, del aire acondicionado, o de cualquier aparato que aporte algo de aire fresco. Aunque tienen la ventaja de ayudarte a dormir mejor, debes saber que hay que tener cuidado con ellos, pues dormir con el ventilador o el aire encendidos también conlleva riesgos. Te contamos cuáles son.
Tener la ventana abierta durante la noche ha sido siempre la manera de mantener la habitación fresca por la noche, sin embargo, cuando el calor aprieta o hay mucho ruido fuera, puede no ser una buena opción. De ahí que se hayan buscado alternativas como aparatos eléctricos que mueven el aire o expulsan frío.
Estos dispositivos van enchufados a la luz, por lo que su uso repercutirá en un gasto mayor y es importante utilizarlos con moderación, por responsabilidad con el medioambiente y con el gasto energético. En cuanto al precio, los ventiladores cuestan menos que los aires acondicionados, que requieren de una instalación más laboriosa. Los precios rondan desde unos 30 euros los ventiladores de pie, desde 70 euros los de techo y a partir de 250 euros los aires acondicionados.
Los ventiladores y aires acondicionados aumentan la sequedad en el ambiente, reduciendo la mucosidad e incrementando el riesgo de infecciones
Elegir uno u otro va a depender del presupuesto del que dispongas, el lugar en el que lo quieras instalar, o tus preferencias. La ventaja de los ventiladores de pie es que se pueden trasladar de un lugar a otro, por lo que además de utilizarlo mientras duermes, también puedes ponerlo para cocinar o ver la televisión, por ejemplo.
Riesgos de dormir con un ventilador o aire acondicionado
La Dra. Myriam Calle, responsable del Servicio de Neumología del Hospital Clínico San Carlos de Madrid, nos ha explicado cuáles son los principales problemas que nos puede causar usar climatizadores de ambiente o aires acondicionados y ventiladores, que son:
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Mayor sequedad
Los sistemas de aire acondicionado expulsan aire frío en la habitación en la que se encuentren, reduciendo la temperatura en su interior. Esto causa “una mayor sequedad de los conductos de las vías respiratorias, fundamentalmente de nariz, de garganta y de vías respiratorias altas”. Además, también reseca el ambiente, por lo que los ojos y la piel pueden sufrir.
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Más riesgo de rinitis e infecciones respiratorias
Esta sequedad, como nos explica la experta, hace menos húmeda la mucosa, cuya función principal es la de proteger de la entrada de microorganismos. “Cuando nuestras vías respiratorias altas, fosas nasales y garganta pierden esta mucosidad, además de las molestias como picor en la garganta o sequedad nasal, también tenemos más riesgo de ser atacados por gérmenes, virus y microorganismos, que pueden acceder más fácilmente y, por tanto, desarrollar infecciones”. Por tanto, aumenta el riesgo de tener rinitis o catarro, y legionella, una infección pulmonar causada por la bacteria Legionella pneumophila, que puede encontrarse en los aires acondicionados.
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Menos hidratación
La Dra. Calle nos advierte de algo muy importante y de lo que se habla poco, y es que, cuando se pone el aire acondicionado y se climatiza la estancia en la que estamos, la sensación de fresco hace que no tengamos tantas ganas de beber agua como si estuviésemos a la temperatura real de la calle. Por eso, hay que estar especialmente atentos a la hidratación y beber lo suficiente, ya que, si no se hace así, empeorará la sequedad de las mucosas y correremos el riesgo de sufrir una deshidratación.
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Dolores musculares
Tener una temperatura baja en la estancia, o un ventilador demasiado cerca del cuerpo, puede hacer que los músculos se tensen como consecuencia de ello y como una manera de protegerse, y este hecho puede derivar en molestas contracturas musculares.
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Daño al medioambiente
Como ya hemos comentado, el uso del aire acondicionado y, en menos medida, el del ventilador, gasta energía y contribuye al cambio climático. Según explican desde la Organización de Naciones Unidas (ONU): “La refrigeración contribuye significativamente al cambio climático debido a las emisiones de hidrofluorocarbonos, dióxido de carbono y carbono negro provenientes de la energía generada a partir de combustibles fósiles que alimenta los aires acondicionados y otros electrodomésticos”.
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Peor sueño por el ruido
Si tu ventilador o aire hacen ruido podría interferir en el correcto descanso. Esto depende mucho de la persona, pues hay quien no escucha nada cuando duerme y a otros les despierta una mosca. También hay quienes abogan porque el sonido de los ventiladores les tranquiliza y les ayuda a conciliar el sueño, pues lo consideran como un ruido blanco.
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Precaución con personas vulnerables
La experta también nos explica que los niños, los mayores y los colectivos con patología, como enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), enfermedades renales, del corazón... pueden ser más vulnerables. Por ejemplo, las personas con alergia, asma, u otros problemas respiratorios, deben tener especial cuidado con los aires acondicionados, pues pueden pasarles factura. Los ventiladores pueden levantar el polvo de los muebles, por lo que aumenta el riesgo para aquellos que son alérgicos.
Consejos para dormir con aire acondicionado o ventiladores
Si no tienes más remedio que optar por alguno de estos aparatos refrigerantes, puedes tener en cuenta algunas cosas para evitar problemas de salud derivados de su uso. Entre los consejos que nos da la Dra. Miriam Calle se encuentran:
Ventilador o aire acondicionado: ¿cuál es mejor para dormir?
La experta en neumología explica que “el ventilador realmente mueve el aire, por lo que no tiene el riesgo de los filtros o de las infecciones, y en ese caso serían más aconsejables los ventiladores. Hay que destacar que no hacen una climatización del ambiente, que es a lo que más problemas de salud se ha asociado”.
Ahora que has llegado al final, y tienes toda la información necesaria, solo te queda decidir qué aparato utilizar o si, por el contrario, optas por el método tradicional de abrir ventanas. Sea lo que sea, ¡feliz y fresco descanso!
Creado: 9 de agosto de 2022