Picadura de pez araña: cómo actuar para evitar riesgos

Las localidades costeras son uno de los escenarios preferidos para pasar unos días de vacaciones y disfrutar del mar, las playas, el sol y las actividades acuáticas o al aire libre, pero a veces nos podemos llevar un susto por muchas precauciones que hayamos tomado. Es lo que ocurre con la picadura del pez araña, que además de ser muy dolorosa, puede llegar a tener graves consecuencias, e incluso ser letal, como ocurrió en agosto de 2020 cuando un joven de 16 años falleció en Platja d’Aro (Gerona) tras la picadura de un ejemplar de esta especie.

Te explicamos las características de este pez, también llamado araña blanca, araña de roca, pez víbora, escorpión, salvariego o faneca brava, por qué no es infrecuente sufrir su picadura, qué síntomas –además del dolor– puedes experimentar y cuáles son los primeros auxilios que se deben administrar en un caso así para reducir las molestias y evitar posibles complicaciones.

Cómo es el pez araña y dónde se encuentra

El Trachinus araneus –nombre científico del pez araña– es de color marrón, pardo verdoso o gris, con algunas manchas negras. Estas tonalidades y un cuerpo delgado y alargado hacen que le resulte fácil enterrarse parcialmente en los fondos arenosos o fangosos donde se oculta para acechar a sus presas, que suelen ser peces pequeños y otros organismos marinos. Su tamaño varía, pero por lo general los ejemplares adultos miden entre 15 y 30 centímetros de longitud aunque, como indican expertos de la Universidad de Granada, pueden alcanzar los 45 centímetros.

“El pez araña habita en regiones bañadas por el mar Mediterráneo y el océano Atlántico. Se encuentra cerca de la costa, en zonas arenosas y fangosas a menos de 100 metros de profundidad. Suele permanecer semienterrado en la arena, por lo que es difícil verlo. El contacto se puede producir por la picadura del pez araña, pero es más frecuente que se produzca por tocar, rozar o pisarlo de forma casual”, nos explica a Webconsultas el Dr. Mikel Urroz Elizalde, Facultativo del Servicio de Farmacología Clínica, Unidad de Toxicología Clínica del Hospital Universitario La Paz, de Madrid. Lo habitual es que solo deje a la vista la primera de sus aletas dorsales, sobresaliendo algunas espinas de la arena o los ojos, siendo estas espinas dorsales las que inoculan el veneno al ser pisadas mientras caminamos en la playa, ya que se rompen y liberan su veneno, aunque también hay algún caso de buceadores que han sido atacados –solo ocurre si están en época de celo– o de pescadores deportivos, o incluso cocineros, que se han clavado alguna espina al manipularlos. En general, a pesar de su atractivo para las personas que practican esnórquel, se debe tener cuidado de no entrar en contacto con este pez, ya que sus espinas pueden atravesar el neopreno. 

“Las glándulas productoras del veneno se encuentran en relación con las espinas de la primera aleta dorsal y el aguijón del opérculo. La penetración de las espinas o el aguijón en la víctima produce la inoculación de la toxina,” continúa el experto, que añade que “esta toxina es un polipéptido sensible a la tripsina y al calor”.

Síntomas de la picadura del pez araña

Las toxinas del pez araña son su mecanismo de defensa contra los depredadores, y en el caso de los humanos pueden provocar lesiones a pescadores deportivos o cocineros que lo manipulen, pero también a las personas que se topan con uno de forma accidental mientras practican snorkel o submarinismo, se bañan, o dan un paseo por la playa.

“Además del dolor característico en la zona de la piel donde se ha producido la herida tras la picadura o la penetración de las espinas”, dice el Dr. Urroz Elizalde, puede aparecer:

• Prurito (picor).
• Vasoconstricción.
• Edema perilesional progresivo (hinchazón).
• Palidez en el lugar de la picadura.
• Cianosis distal (coloración azul de la piel).
• El veneno también provoca una reacción inflamatoria con un edema posterior en el sitio de la herida.

Esto puede acompañarse de otros síntomas generales agudos, entre los que destacan:

• Mareo.
• Dolor de cabeza.
• Náuseas.
• Vómitos.
• Hipotensión.
• Sudoración.
• Calambres musculares.

“La gravedad dependerá de la cantidad de veneno a la que se haya expuesto y si el veneno ha entrado en contacto con los vasos sanguíneos y, por tanto, con la circulación sanguínea”, señala el experto en toxicología del Hospital La Paz, y añade que, si el veneno pasa a la circulación, el envenenamiento puede causar:

• Alteraciones en el ritmo cardíaco.
• Dificultad respiratoria.
• Parálisis muscular.
• Shock o parada cardio-respiratoria.

“Los excepcionales casos de muerte reportados, se han asociado a la desafortunada circunstancia de penetración del tóxico venenoso directamente en los vasos sanguíneos”.

Qué debes hacer si te pica un pez araña

“Habitualmente el veneno permanece localizado en la zona de contacto, produciendo síntomas locales”, afirma el Dr. Urroz Elizalde, que indica que “se deben aplicar paños calientes o realizar una inmersión de la parte afectada en agua caliente (a 39°C–45°C, o la máxima temperatura que pueda tolerar el paciente) durante 20–90 minutos. Dado que el veneno es sensible al calor, se produce un alivio del dolor. Está contraindicado el torniquete y la incisión y succión de la herida con objeto de extraer el tóxico”.

Si te pica un pez araña, es importante tomar medidas adecuadas para tratar la picadura y reducir el malestar lo máximo posible hasta recibir atención por parte de un profesional sanitario. Los principales pasos recomendados son:

• Lavado de la herida y extracción de fragmentos de espinas que se encuentren visibles utilizando unas pinzas desinfectadas y agua de mar, asegurándonos de no romper los fragmentos ni empeorar la herida. El sanitario Miguel Assal, explica en un vídeo de TikTok cómo hacerlo, e insiste en que no frotemos la herida, ni intentemos extraer las púas como si se tratase de un grano.
• Inmersión en agua caliente. Sumergir la zona afectada en agua caliente (unos 40-45 °C) durante al menos media hora, porque el calor contribuye a neutralizar las toxinas del veneno –ya que éstas son termolábiles, sensibles al calor–, y a reducir la sensación de dolor.
• Para ayudar a calmar el dolor puede ser útil tomar analgésicos como paracetamol o ibuprofeno. Así como aplicar algún anestésico tópico (lidocaína en gel o spray) si es posible. Si se acude al hospital y el dolor es sumamente intenso en ocasiones puede llegar a administrarse morfina.
• Búsqueda de atención médica. El Dr. Urroz Elizalde señala que “se recomienda la valoración médica en todos los casos. Se debe limpiar la herida y retirar los restos del pez o de las espinas en su caso, siempre por parte de personal sanitario. No se suturará la herida. Aunque no existe antídoto contra el veneno del pez araña, el médico que valore al paciente puede indicar diferentes tratamientos según el caso concreto de las manifestaciones clínicas que presente el paciente. En los pacientes inmunocomprometidos o en aquellos con lesiones de riesgo se indicaría el uso de antibióticos, por vía parenteral o por vía oral. Como en toda herida, se administrará un recuerdo de la vacuna antitetánica”.

En los días posteriores a recibir atención para tratar la picadura del pez araña, hay que estar atento a posibles signos de infección (enrojecimiento creciente, calor, supuración) y síntomas sistémicos como fiebre, náuseas o vómitos. Igualmente, hay que mantener la herida limpia, y tener en cuenta que esta puede tardar en curarse entre uno y tres meses. Para aliviar el dolor residual y reducir la hinchazón se puede alternar compresas frías con analgésicos.