¿Por qué nos duele la lengua?
Actualizado: 21 de septiembre de 2022
La lengua es un órgano muscular de suma importancia para comer, tragar o hablar y que, generalmente, tiene una fuerte resistencia. Pero, debido a su ubicación, no es extraño que sufra mordeduras mientras masticamos que pueden producir heridas en su superficie que resultan bastante dolorosas al roce con los alimentos.
Las mordeduras involuntarias, sin embargo, no son el único problema al que puede enfrentarse la lengua, que también puede estar dolorida por diferentes causas; afecciones que en la mayoría de los casos no son preocupantes y que se tratan fácilmente en caso de ser necesario, aunque otras sí podrían ser un síntoma de problemas de salud más graves.
La lengua puede estar dolorida por diversas causas, la mayoría no preocupantes y fáciles de tratar, aunque otras pueden ser un síntoma de problemas de salud más graves
Principales causas del dolor de lengua
Si quieres saber por qué te duele la lengua, te damos las respuestas:
Aftas bucales
Lo normal es que a lo largo de nuestra vida a todos, en algún momento, nos salgan aftas en la lengua, unas pequeñas úlceras blancas, generalmente rodeadas por un borde de color rojo más intenso que el de la lengua, que pueden resultar sumamente dolorosas a la hora de comer o hablar.
Aún no se conoce una causa exacta que explique su aparición, pero los expertos las asocian con el estrés y, en el caso de las mujeres, con los cambios hormonales. Estas úlceras no son contagiosas y en la mayoría de los casos desaparecen solas con el paso de los días, aunque si las aftas son recurrentes se aconseja consultar al médico.
Herpes labial
Aunque suele aparecer en la parte externa del labio, no es difícil que el herpes dé el salto a la lengua. Se puede confundir con las aftas, pero a diferencia de estas sí se conoce su causa, un virus, y por tanto sí es contagioso. De hecho, es muy contagioso, por lo que se recomienda extremar las precauciones como no besar, o no compartir vasos o cubiertos con otras personas.
En ocasiones los médicos pueden prescribir algún medicamento antiviral para acelerar su curación y disminuir el dolor.
Candidiasis
En este caso hablamos de una infección por hongos. Cuando el sistema inmune no puede detener el crecimiento de este hongo presente en la boca, la garganta y el tracto digestivo, pueden aparecer en la lengua unas aftas amarillentas y blanquecinas que son bastante dolorosas. La candidiasis es más habitual en bebés y personas con el sistema inmune debilitado, ya que esta debilidad es precisamente la que aprovecha el hongo para reproducirse sin control.
Para la mejora y cura de la candidiasis los médicos suelen recetar medicamentos antifúngicos.
Glositis
La glositis es una inflamación de carácter agudo o crónico de la lengua que suele manifestarse como el síntoma de otros problemas de salud como las alergias alimentarias, la celiaquía o la deficiencia de determinadas vitaminas o minerales. A consecuencia de la glositis, la lengua se inflama y aparecen en la superficie de la misma, generalmente en los laterales, pequeñas lesiones que pueden resultar muy dolorosas. Otros síntomas derivados de la glositis pueden ser las dificultades tanto para masticar y tragar alimentos, como para hablar.
Existen diferentes tipos de glositis, por lo que su tratamiento variará en función del que presente el paciente, así como de la causa que haya actuado como desencadenante.
Síndrome de la boca ardiente
También conocido como estomatodinia, el síndrome de la boca ardiente hace referencia al escozor, hormigueo, entumecimiento, picor y ardor que se manifiesta en la lengua, principalmente en la punta y las zonas laterales de esta (aunque puede extenderse a otras zonas de la cavidad oral), y que puede prolongarse durante meses e incluso años, variando en intensidad los síntomas, y llegando a cambiar el sabor de los alimentos ingeridos (un punto más amargos y metalizados).
La aparición del síndrome de la boca ardiente, aunque no siempre es fácil conocer sus causas, se relaciona con el tabaquismo, el estrés, algunas medicinas o tratamientos, y patologías como la diabetes, problemas de tiroides, reflujo gastroesofágico, alergias a alimentos, o anemia. El tratamiento para combatir esta afección, una vez diagnosticada, dependerá de la intensidad del dolor que padece el paciente en su lengua, así como de la causa que la ha provocado.
Cáncer oral
En la mayoría de los casos, como hemos visto hasta ahora, una lengua dolorida no tiene por qué ser síntoma de nada grave. Sin embargo, en forma de bulto, llaga, o una especie de parche rojo o blanco, que no desaparece, y que en sus primeros estadios a veces ni siquiera duele, puede aparecer un tumor en la cavidad oral.
Por ello, los especialistas recomiendan que si observamos bultos o llagas que no han desaparecido en dos semanas consultemos de inmediato al médico de cabecera o al dentista para descartar problemas mayores.
Creado: 30 de enero de 2018