Tendencia ‘No poo’ ¿Es bueno lavarse el pelo sin champú?
Actualizado: 21 de septiembre de 2022
Cada vez hay más personas que se apuntan a la moda No poo, la abreviatura de no shampoo (no champú), que consiste en dejar a un lado los productos para lavarse el cabello y utilizar solo agua, bicarbonato y vinagre. Esta tendencia surgió del deseo de huir de las sustancias artificiales y de los productos químicos, como el alcohol o el conservante kathon, que suelen contener los champús convencionales.
Cómo se lleva a cabo la tendencia ‘No poo’
Lavarse con agua mezclada con bicarbonato y vinagre es considerado por sus adeptos como la forma más ecológica y respetuosa de cuidar el pelo y el cuero cabelludo, evitando las irritaciones que pueden provocar otros productos, y dejando el pelo limpio durante mucho más tiempo y con un brillo natural. La función de los champús es retirar la grasa producida por las glándulas sebáceas, donde están acumuladas las células muertas del cuero cabelludo. Esta grasa debe ser eliminada con regularidad para evitar posibles infecciones causadas por esos microorganismos.
La tendencia ecológica No poo, lavarse el cabello con agua, bicarbonato y vinagre, puede causar irritaciones, infecciones en el cuero cabelludo y daños en el pelo
Para llevar a cabo la tendencia No poo, basta con mojar el cabello con agua y frotar; si tu pelo es graso puedes añadir una cucharada de bicarbonato a una taza de agua y aplicarlo con suaves masajes por el cuero cabelludo, luego debes aclarar y listo. Si tu pelo es largo o seco y necesitas una dosis de nutrición o una herramienta que te ayude a facilitar el peinado, puedes optar por añadir a la mezcla anterior vinagre; los más usados son los de manzana o de sidra, por sus propiedades hidratantes.
Peligros de la tendencia No poo
Sin embargo, muchos dermatólogos, como la doctora Lola Conejo-Mir, miembro de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV), desaconsejan el uso de este método. Las causas son que el bicarbonato puede provocar infecciones, un deterioro del cabello, y puede llegar a irritar el cuero cabelludo al tener un pH más alcalino, con valores que rondan los 8.0. Lo mismo ocurre con el vinagre, cuyo pH oscila entre 2.4 y 3.4 y que, al ser ácido, puede cambiar el pH del pelo y producir aún más irritaciones.
Los especialistas en dermatología también alertan de que el uso continuado de bicarbonato puede decolorar el cabello y producir el mismo efecto que el abuso del champú, es decir, la segregación de una gran cantidad de grasa. Hay que recordar que la producción de sebo no solo depende de los lavados, sino que las hormonas también pueden provocar un desequilibrio. Por ello, si se tiene alguna patología en el cuero cabelludo, como psoriasis o dermatitis seborreica, se recomienda usar productos de tratamiento específicamente destinados a las personas con estas afecciones, que se pueden alternar con algunos neutros.
En el mercado, además, existe una gran variedad de champús, indicados no solo según el tipo de cabello (rizado, encrespado, seco…), sino que también puedes elegir uno u otro en función de su composición; de esta forma, puedes encontrar productos sin parabenes, sin siliconas, o con un pH determinado –los valores recomendados están entre 4.5 y 5.5–, que pueden constituir una buena opción si quieres cuidar tu cabello sin riesgos añadidos.
Creado: 30 de marzo de 2016