Las mujeres embarazadas presentan déficit de yodo
18/03/2009
El Departamento de Salud de la Comunidad Valenciana ha realizado un estudio en el que ha incluido a 232 mujeres, con el objetivo de valorar el estado nutricional del yodo en un grupo de embarazadas, entre 10 y 13 semanas de gestación, sin antecedentes de enfermedad tiroidea.
Se realizó una recogida de datos, como el consumo de sal yodada y los suplementos de yodo, una extracción de sangre para ver los niveles de hormona, y prueba de orina. Así como el nivel de hormona en el recién nacido a las 48 horas de nacer.
Los resultados fueron bastante significativos, evidenciando que existe una ingesta de yodo insuficiente. Lo mismo ocurrió en cuanto a la ingesta de suplementos yodados, siendo muy baja, ya que sólo el 12% ingirió más de 100 mg de yodo al día en forma de suplementos.
El yodo es un elemento natural fundamental para la correcta fabricación de las hormonas por parte de la glándula tiroides, imprescindibles para el desarrollo del sistema nervioso y el crecimiento
La ingesta de yodo recomendada para la población es de 150-200 mg. Durante la gestación, la mujer absorbe menor cantidad del yodo ingerido. Por ello, además de consumirlo en la dieta habitual en forma de sal yodada y a través de alimentos ricos en yodo como el pescado, se recomiendan suplementos de este mineral, hasta alcanzar concentraciones diarias de 300 mg.
Esta recomendación se publicó en 2004 en “Manifiesto sobre la erradicación de la deficiencia de yodo en España”, realizado por las principales Sociedades Científicas Españolas y las Autoridades Sanitarias. Pero, desde entonces, no se han renovado los esfuerzos para concienciar a la población general y, en especial, a las mujeres embarazadas, de la importancia de un consumo de yodo suficiente.
Alimentos | Contenido en yodo. Microgramos/100 gr de porción |
---|---|
Almejas, berberechos | 120 |
Ajo | 94 |
Cigalas, langostinos, gambas | 90 |
Mero | 52 |
Acelgas, judías verdes | 35 |
Piña | 30 |
Huevo de gallina | 20 |
Cebolla y cebolleta | 20 |
Champiñones y setas | 18 |
Ostras | 18 |
Lenguado | 17 |
Sardinas | 16 |
Habas secas | 14 |
Cacahuetes | 13 |
Piña en almíbar | 10 |
Sardinas en conserva | 10 |
Leche de vaca | 9 |
Zanahoria | 9 |
Hígado | 8,6 |
Atún y bonito | 8 |
Tomate | 7 |
Ciruelas secas | 7 |
Caracoles | 6 |
Chocolates | 5,5 |
Carne magra de cerdo | 5,2 |
Lechuga y escarola | 5 |
Vinos de mesa | 5 |
Yogur | 3,8 |
Patatas | 3 |
Limón | 3 |
A pesar de las recomendaciones vigentes, la población no está concienciada de la necesidad de este mineral. Por ello, las Autoridades Sanitarias y los profesionales de la Sanidad deben esforzarse para promover:
- El uso universal de la sal yodada.
- Los suplementos de yodo para embarazadas hasta alcanzar niveles de 300mg/día.
El yodo en el embarazo
Es importante que la mujer tenga una buena reserva de yodo, incluso antes de quedarse embarazada. Sobre todo durante los tres primeros meses de embarazo, con el objeto de que lleguen al feto las cantidades necesarias para su desarrollo y la maduración de sus tejidos.
Igualmente ocurre durante la lactancia, ya que el niño recibe yodo a través de la leche materna para su correcto crecimiento y desarrollo cerebral. Por ello, es importante acudir al médico para que valore cada caso individualizado.
Actualizado: 7 de junio de 2022