Cómo elegir las fresas, conservación y usos en la cocina
Por: Sofía Larrucea
Periodista especializada en salud
Actualizado: 15 de marzo de 2024
Cómo elegir las fresas: en qué debes fijarte
Podría decirse que las fresas son una de las frutas más delicadas. Por ello, a la hora de comprarlas se recomienda escogerlas bien, y preferiblemente en temporada. En este sentido, es importante optar por aquellas que presenten un color uniforme rojo intenso y uniforme, y sin ninguna parte blanca o verde cerca del tallo –indica que la fresa no está del todo madura y puede estar demasiado ácida–. El brillo natural es también un signo de frescura.
En cuanto a las hojas, si el verde ha perdido intensidad y amarillea desvela que la fruta no es fresca y que las fresas fueron recogidas hace tiempo. Además, su superficie debe ser firme, sin irregularidades, pero no duras. Evita las fresas que presenten signos de ser demasiado blandas, arrugadas o que tengan manchas de moho.
Respecto a su aroma, también debe ser intenso, ya que es uno de los indicadores más fiables de la frescura y dulzura de las fresas. Así, las fresas frescas y maduras desprenden un aroma dulce y fuerte. Si no huelen a nada, probablemente no sean muy dulces.
El tamaño de la fresa no afecta directamente su sabor, pero las fresas de tamaño medio suelen ser más jugosas. Las fresas muy grandes pueden ser menos sabrosas y algo aguadas.
Por último, si estás comprando fresas en un paquete, asegúrate de que este no tenga signos de humedad, moho o daños, ya que esto puede afectar la calidad de todas las fresas dentro del paquete. Las fresas de origen local suelen ser una buena elección porque no requieren largos tiempos de transporte, lo que las mantiene frescas. Así pues, una vez dejada atrás la polémica de las fresas y la hepatitis, es hora de disfrutarlas al máximo.
Cómo conservar las fresas
Conservar las fresas adecuadamente después de comprarlas es crucial para mantener su frescura y sabor durante el mayor tiempo posible. Lo primero que debe tenerse en cuenta es que su consumo debe ser rápido, pues su vida útil es bastante corta (como máximo aguantan dos días en la nevera). Para conservarlas el máximo tiempo posible, se recomienda no quitar las hojas verdes, ni lavarlas, hasta que no se vayan a comer.
Aquí te dejamos algunas recomendaciones para conservar tus fresas en casa:
- No las laves hasta que vayas a consumirlas: el agua puede promover el crecimiento de moho en las fresas. Es mejor lavarlas solo justo antes de comerlas o usarlas en tus recetas.
- Retira las fresas dañadas: antes de almacenarlas, revisa las fresas y retira cualquier fruta que esté magullada, dañada o mohosa para evitar que el deterioro se propague a las fresas sanas.
- Almacenamiento en el refrigerador: para una conservación a corto plazo, coloca las fresas en un recipiente abierto o en una bolsa perforada para permitir la circulación del aire, y guárdalas en el refrigerador. Esto puede ayudar a mantenerlas frescas durante unos días.
- Usa papel de cocina: coloca un pedazo de papel de cocina en el fondo del recipiente o bolsa donde vayas a guardar las fresas. El papel absorberá la humedad excesiva, reduciendo el riesgo de que se desarrollen moho y bacterias.
- Conservarlas en un lugar fresco y ventilado: si vas a consumir las fresas pronto después de comprarlas y el clima no es muy cálido, puedes dejarlas en un lugar fresco y ventilado. Sin embargo, este método solo es adecuado para consumos en un día o dos.
- Evita el almacenamiento en envases cerrados: no guardes las fresas en envases completamente cerrados, ya que esto puede aumentar la humedad y fomentar el crecimiento de moho.
- Método del vinagre: algunas personas recomiendan sumergir brevemente las fresas en una solución de vinagre y agua (una parte de vinagre por tres partes de agua) antes de almacenarlas. Esto puede ayudar a eliminar bacterias y moho. Asegúrate de secarlas completamente después de este proceso para evitar la humedad antes de guardarlas en el refrigerador.
- Congelación para largo plazo: sí, las fresas ¡se pueden congelar! Si no planeas consumir las fresas pronto, puedes congelarlas para prolongar su vida útil. Antes de meterlas en el congelador, debemos lavar bien las fresas, cortar las hojas verdes y secarlas completamente con una servilleta. Congélalas hasta que estén firmes y luego transfiérelas a una bolsa de congelación hermética. El tiempo máximo que pueden estar en el congelador es seis meses. Un dato importante: debe advertirse que, tras descongelarlas, estas pueden estar algo blandas, por lo que se recomienda no comerlas solas, sino utilizarlas para hacer batidos, tartas o mermeladas, por ejemplo.
Uso de las fresas en la cocina
Son muchos los usos que pueden hacerse de este fruto rojo en la cocina. Además de consumir las fresas al natural, añadiéndoles si se desea zumo de naranja, nata, leche o yogur, podemos elaborar multitud de recetas con fresas, como ricos y ligeros pasteles, macedonias, mermeladas, licores, batidos, o helados, por ejemplo. Y no debe olvidarse que la fresa también se puede utilizar como el ingrediente estrella para hacer salsas, tanto dulces como saladas, que acompañen a la carne o al pescado.
Receta de salsa de fresa para carne o pescado
Como decíamos, las fresas pueden ser el ingrediente perfecto para hacer sabrosas salsas que acompañen a platos salados, tanto preparaciones cárnicas como para alegrar un pescado. Además, ¡su elaboración es muy sencilla!
- 400g de fresas
- 3 cucharadas de azúcar
- 2 cucharadas de vino blanco
- 1 cucharada de vinagre balsámico
- ½ chile fresco o, en caso de que no se encuentre, también puede ponerse una guindilla
- Sal y pimienta
- Primero de todo, troceamos bien las fresas. Es importante que los trozos sean similares en cuanto a tamaño y grosor.
- Una vez troceadas, las ponemos en una cazuela junto a los demás ingredientes y lo cocinamos a fuego medio durante unos 25 minutos y… ¡Voilà, ya tenemos nuestra salsa lista para servir!
Es importante que la salsa no nos quede muy espesa (lo ideal es que presente una consistencia parecida a la de una gelatina), pues en frío se espesará aún más.
Otras ideas para usar las fresas en tus platos
Como decíamos, las fresas son una fruta versátil y deliciosa que puede usarse en una amplia variedad de recetas, desde postres hasta platos salados. Aquí tienes algunas ideas y consejos más para incorporar fresas en tu cocina:
En postres
- Tartas y pasteles: decora tartas y pasteles con fresas frescas para añadir un toque de color y sabor. Las fresas combinan especialmente bien con el chocolate y la crema pastelera.
- Mousse de fresa: prepara un mousse ligero y aireado con puré de fresas, crema batida y gelatina. Es un postre elegante y refrescante.
- Helado y sorbete: usa fresas para hacer helados caseros o sorbetes. El sorbete de fresa es una opción deliciosa y refrescante para los días calurosos.
En desayunos
- Smoothies: combina fresas con tu fruta favorita, yogur y un poco de miel para hacer smoothies saludables y nutritivos.
- Toppings para cereales y yogur: añade fresas frescas cortadas a tu yogur o cereal matutino para un desayuno rápido y lleno de vitaminas.
- Pancakes y waffles: incorpora fresas frescas o en compota a tus pancakes o waffles para un desayuno especial.
- En Ensaladas
- Ensaladas de hojas verdes: añade fresas cortadas a ensaladas de hojas verdes, como espinaca o rúcula, junto con queso de cabra o feta y nueces o almendras para una combinación de sabores dulce y salado.
- Ensalada de fresas con vinagreta: prepara una ensalada fresca con fresas, pepino, y albahaca, y aliña con una vinagreta de balsámico y miel.
Platos salados
- Salsas y chutneys: crea salsas y chutneys de fresas para acompañar carnes o quesos. La combinación de fresas con ingredientes como el vinagre balsámico y la pimienta puede ser sorprendentemente sabrosa.
- Marinadas: usa fresas trituradas como base para marinadas ácidas que pueden ablandar y añadir un toque dulce a carnes como el cerdo o el pollo.
Bebidas
- Cócteles y mocktails: las fresas son un excelente ingrediente para cócteles y mocktails. Prueba un mojito de fresa o un daiquiri de fresa para una bebida refrescante.
- Infusiones de agua: añade fresas a tu agua para un toque refrescante y sutilmente dulce. Combinarlas con otras frutas y hierbas, como limón y menta, puede hacer una bebida deliciosamente hidratante.
Consejos adicionales para aprovechar las fresas
- Aprovecha la temporada: las fresas son más sabrosas y económicas durante su temporada alta. Aprovecha este momento para experimentar con ellas en la cocina.
- Experimenta con texturas: las fresas pueden ser usadas tanto frescas como cocidas. Experimenta con diferentes texturas, como fresas asadas para concentrar su dulzura o fresas frescas para un toque más ligero y refrescante.
- Combinaciones de sabores: las fresas combinan bien con una variedad de sabores, incluyendo la vainilla, el limón, la menta, el chocolate, y ciertos quesos como el brie o el mascarpone. Experimentar con estas combinaciones puede llevar tus platos a nuevos niveles de delicia.
Creado: 8 de marzo de 2017