¿Qué puedo beber para hidratarme en verano?
Actualizado: 14 de julio de 2022
Además de agua, hay una gran variedad de bebidas para mantenerse bien hidratado, cuyo contenido principal es precisamente el agua, pero cuyo sabor seguramente te resultará más apetecible.
-
Zumos de frutas naturales
Sin duda esta es la opción más saludable después del agua. Te aportarán vitaminas, energía procedente del azúcar de la fruta, y sales minerales como el potasio. También puedes encontrar zumos envasados de gran calidad que conservan la mayoría de los nutrientes de la fruta fresca, aunque debes comprobar en la etiqueta los ingredientes para saber el porcentaje de fruta y azúcares que les han añadido.
-
Infusiones
Se preparan con agua hirviendo, pero si no te apetece tomarlas calientes, por aquello de las altas temperaturas, el té frío es una buena alternativa, y puedes probar qué tal sabe tu infusión preferida después de pasar un buen rato en la nevera. En el mercado encontrarás una gran variedad de infusiones frutales para comprobar su sabor en frío.
-
Batidos
De leche con frutas, o de helado si no necesitas guardar la línea. Con leche semidesnatada y frutas los batidos están deliciosos, aportan menos calorías, y puedes dárselos a los niños para desayunar o merendar si son reacios a tomar fruta.
-
Refrescos
Son agradables al paladar y tienen un alto contenido en agua, sin embargo, su aporte nutricional es prácticamente nulo. Algunos contienen una pequeña cantidad de zumo de frutas, y los que no son light también llevan un exceso de azúcar, por lo que sí aportan calorías y es preferible evitarlos y optar por opciones más saludables.
Sangría: cómo preparar este capricho de verano
Aquellos que no tengan contraindicado el consumo de alcohol algún día pueden darse un capricho de verano muy español: la sangría. Hay muchas formas de prepararla, y se puede hacer más floja añadiéndole bastante hielo, disminuyendo así el contenido alcohólico. Lo ideal en cualquier caso es evitar la opción con alcohol, por lo que puede prepararse con un vino sin alcohol (ya hay muchos en el mercado).
Para seis personas se prepara con una botella de vino tinto (no es necesario que sea caro, pero tampoco el más barato del supermercado, y aunque el sabor será distinto, se puede sustituir por mosto tinto, que no contiene alcohol), el zumo de tres o cuatro naranjas, o medio litro de algún refresco de naranja o limón sin gas (aunque lo ideal es la fruta natural). Es conveniente que tanto el vino como las naranjas o el refresco estén bien fríos.
Después se pelan y cortan en trozos pequeños dos o tres melocotones (depende del tamaño), una pera y un plátano, y se añaden a la mezcla junto a varias cucharadas de azúcar (mejor si es azúcar morena, aunque cuesta más que se disuelva en frío). La cantidad de fruta y azúcar depende de los gustos, y también se pueden echar trocitos pequeños de limón o naranja.
Finalmente se espolvorea con un poco de canela y se remueve todo. Lo ideal es mantener la mezcla en el frigorífico durante por lo menos media hora para que esté bien fresquita y coja el sabor de la fruta. Se puede rebajar con unos cubitos de hielo si se quiere conseguir una sangría más flojita; en cualquier caso, hay que beberla fría. Una sugerencia: se puede tomar un vasito como postre.
Creado: 8 de agosto de 2011