Recetas y consejos para poner en práctica el método del plato
Por: Leire Moneo
Periodista experta en alimentación
Actualizado: 3 de octubre de 2022
Las posibilidades de poner en práctica el método del plato y acertar con él son casi infinitas, pues hay muchísimas combinaciones posibles, más o menos elaboradas en función del tiempo del que dispongamos. Toma nota de algunas ideas y recetas:
Paella marinera
La típica paella marinera con sofrito de tomate y cebolla, pimiento y toda la variedad de verduras que más nos gusten es un excelente ejemplo del plato combinado perfecto. El marisco puede sustituirse por pollo o pavo en función de nuestras preferencias.
Hamburguesa de lentejas con queso
Colocar las lentejas y el arroz cocido en un bol junto con el queso feta y con un tenedor lo vamos mezclando hasta formar una masa compacta. Añadir un sofrito de cebolla y dar formar a una o dos hamburguesas que doraremos a la plancha. La hamburguesa puede servirse acompañada de pan integral y de una ensalada de tomate y lechuga.
Parrillada de verduras con tostada de sardinas en aceite de oliva
Elegir las verduras que más nos gusten para hacerlas en una plancha aderezadas con un poco de aceite de oliva. Una buena opción pueden ser los espárragos trigueros, unas rodajas de berenjenas y unas tiras de calabacín. Acompañar de una tostada de pan integral con tomate natural y un par de sardinas por encima.
10 Consejos para sacar partido al método del plato
Toma nota de algunos consejos prácticos que te permitirán emplear el método del plato de forma sencilla en tus comidas diarias:
-
Usa aceite de oliva virgen
Tanto para cocinar como para aliñar tus ensaladas y recetas.
-
Bebe suficiente agua
Recurre a ella como bebida principal tanto en tus comidas diarias como entre horas o a la hora de hacer ejercicio.
-
Ingiere variedad de frutas
Dando prioridad a las de temporada y de proximidad, elígelas frescas y, por qué no, de todos los colores. Tendrás un aporte inmediato de vitaminas, minerales, agua y fibra.
-
Reparte las comidas a lo largo del día
Fracciona y diversifica la alimentación en cinco comidas al día y establece un horario para cada una: desayuno, comida y cena, además de media mañana y merienda.
-
Limita el consumo de fast food
Evita en lo posible la ingesta de comidas muy energéticas ricas en grasas saturadas y azúcares.
-
Consumir productos lácteos
Toma 2-3 raciones diarias de leche, yogur (mejor sin azúcar), queso fresco… Escoge lácteos desnatados o bajos en grasa.
-
Incorporar frutos secos
Crudos o tostados, preferiblemente sin sal, pueden tomarse moderadamente entre horas, o como complemento del desayuno o la merienda.
-
Métodos de cocción
Las preparaciones más saludables son aquellas que requieran poca grasa, como la cocción al vapor, el horno, la plancha o los salteados.
-
Limitar el consumo de sal
Ganarás en salud y recuperarás el sabor natural de los alimentos. También puedes optar por especias, cítricos o hierbas aromáticas.
-
Haz que los niños participen
Involucrar a los más pequeños en la elaboración de recetas saludables y comer todos juntos en familia puede favorecer la aceptación de nuevos alimentos y ayudar a mejorar sus hábitos alimentarios.
Por último, recuerda que de nada servirá si no lo complementas con otros hábitos saludables. Así que duerme bien, vigila tu peso (sin obsesionarte) y mantén el estrés bajo control. No olvides hacer deporte y evita el sedentarismo: para cumplir con las recomendaciones de la OMS (al menos una hora de actividad física diaria) cuentas con decenas de actividades deportivas o lúdicas, y recuerda que puedes compartirlas e inculcarlas a los más pequeños de la casa.
Creado: 13 de junio de 2018