Tipos de queso, usos y recetas con queso
Actualizado: 5 de junio de 2024
Variedades de queso
Los amantes del queso no podrán quejarse de las múltiples variedades, formas, colores y olores en las que pueden encontrar su alimento favorito en los mercados. Los diferentes tipos de queso existentes pueden clasificarse en función del proceso de elaboración o de su contenido en materia grasa.
Los quesos según su proceso de elaboración pueden ser:
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Quesos frescos
Obtenidos mediante fermentación láctica, son los más simples de elaborar. No se someten a maduración o afindo, por lo que tienen un alto contenido de humedad y una textura suave, fresca y cremosa. Se consumen frescos poco después de su fabricación, después de que se coagula la leche con cuajo o ácidos, como el vinagre o el limón, lo que significa que no desarrollan sabores complejos. Algunos ejemplos de quesos frescos son el queso de Burgos, el de Ricotta, el Cottage..
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Quesos afinados, madurados o fermentados
Además de la láctica, se pueden dar otros tipos más de fermentaciones, dando lugar a quesos:
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Quesos fundidos
Obtenidos por trituración del queso, mezcla y fusión de otros quesos, con ayuda de tratamiento térmico. El queso fundido es un producto procesado que se obtiene mezclando diferentes tipos de queso con otros ingredientes, como emulsionantes, leche en polvo, mantequilla y sal. Luego, esta mezcla se calienta y se homogeniza para obtener una textura suave y uniforme. El queso fundido es más homogéneo y suave que el queso de pasta hilada, y no tiene la textura fibrosa característica. Además, tiene una vida útil más larga gracias a los aditivos. Algunos ejemplos comunes son las lonchas de queso tipo americano o los quesos para untar.
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Quesos procesados
Producidos a partir de uno o más quesos naturales a los que se les añade emulsionantes, nata, aromas, frutos secos, especias… Mantienen su valor nutritivo, aunque pierden el carácter único del queso de origen.
Clasificacion del queso según su materia grasa
El contenido de materia grasa en los quesos es otro factor importante para su clasificación. Este contenido se mide en relación a la materia seca, es decir, la cantidad de grasa en lo que queda después de eliminar toda el agua del queso. Mientras más grasa, más cremoso será el queso y, por lo general, también más calórico.
Los quesos según su contenido graso son:
Otras clasificaciones hacen referencia al tipo de leche (vaca, cabra, oveja…), contenido de agua (blandos o duros) y otras características.
Usos del queso en la cocina: recetas caseras con queso
Además de su consumo como tal, la versatilidad del queso en la cocina lo convierte en un ingrediente fundamental en muchos tipos de preparaciones. Cuando es cocinado desarrolla un sabor mucho más intenso y ayuda a dar cremosidad y textura al plato. Desde alegrar una simple ensalada, a potenciar el sabor de una receta de pasta o arroz a través del parmesano, ser ingrediente básico de un plato como la pizza, rellenar una carne, enriquecer una sopa o crema de verduras, o endulzar nuestra mesa con mousses y flanes.
Sea como sea, hacerle un sitio al queso en nuestra cocina es una decisión acertada con beneficios para nuestra salud y nuestro paladar.
Tarta de queso saludable
¿Buscas un postre delicioso y saludable que no comprometa tu dieta? Esta tarta de queso saludable, hecha con queso crema bajo en grasa y endulzada con stevia, es la opción perfecta para los cheeselovers. Con un toque de limón y una textura suave, es el final perfecto para cualquier comida.
- 500 g de queso crema bajo en grasa
- 200 g de yogur griego sin azúcar
- 3 huevos
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
- 100 g de stevia o edulcorante natural
- 1 cucharada de maicena
- Ralladura de 1 limón
- Precalentar el horno a 160°C.
- En un bol grande, batir el queso crema con el yogur griego hasta obtener una mezcla homogénea.
- Añadir los huevos uno a uno, mezclando bien después de cada adición.
- Incorporar la esencia de vainilla, la stevia y la maicena. Mezclar hasta que todo esté bien integrado.
- Añadir la ralladura de limón y mezclar nuevamente.
- Verter la mezcla en un molde para tarta previamente engrasado.
- Hornear durante 1 hora, o hasta que el centro esté casi cuajado.
- Dejar enfriar a temperatura ambiente y luego refrigerar por al menos 1 hora antes de servir.
Quesadillas de pollo y queso
Lleva a tu mesa el auténtico sabor mexicano con estas quesadillas de pollo y queso. Llenas de proteínas y vegetales, estas quesadillas son una opción deliciosa y nutritiva para un almuerzo o cena rápida en familia.
- 4 tortillas de maíz o de trigo integral
- 200 g de pechuga de pollo desmenuzada
- 200 g de queso cheddar bajo en grasa rallado
- 1 pimiento rojo en tiras
- 1 cebolla pequeña en rodajas
- Aceite de oliva en spray
- Sal y pimienta al gusto
- En una sartén grande, rociar aceite de oliva y saltear la cebolla y el pimiento rojo hasta que estén tiernos.
- Añadir el pollo desmenuzado y saltear durante unos minutos hasta que esté bien caliente.
- Sazonar con sal y pimienta al gusto.
- Colocar una tortilla en una sartén caliente y añadir una capa de queso rallado.
- Añadir una porción de la mezcla de pollo y verduras sobre el queso.
- Cubrir con más queso y colocar otra tortilla encima.
- Cocinar cada lado de la quesadilla hasta que esté dorada y el queso se haya derretido, aproximadamente 2-3 minutos por lado.
- Repetir con las tortillas restantes.
- Cortar en porciones y servir caliente.
Croquetas de queso y espinacas
Sorprende a tus invitados con estas croquetas de queso y espinacas, una alternativa saludable y sabrosa a las tradicionales. Horneadas y no fritas, son un aperitivo crujiente por fuera y cremoso por dentro.
- 200 g de espinacas frescas
- 150 g de queso feta desmenuzado
- 1 huevo
- 50 g de harina integral
- 100 g de pan rallado integral
- Aceite de oliva en espray
- Sal y pimienta al gusto
- Precalentar el horno a 200°C.
- Cocinar las espinacas en una sartén con un poco de agua hasta que estén blandas. Escurrir y picar finamente.
- En un bol grande, mezclar las espinacas con el queso feta.
- Añadir el huevo y la harina integral, y mezclar bien hasta obtener una masa homogénea.
- Formar pequeñas croquetas con las manos.
- Pasar cada croqueta por el pan rallado para cubrirlas bien.
- Colocar las croquetas en una bandeja para hornear y rociar con aceite de oliva en espray.
- Hornear durante 25-30 minutos, o hasta que estén doradas y crujientes.
- Servir calientes.
Flan de queso ligero
Disfruta de un postre clásico con una versión más ligera y saludable. Este flan de queso, con una base de queso crema bajo en grasa y edulcorado con stevia, ofrece una textura suave y un sabor delicioso que conquistará a tus comensales.
- 300 g de queso crema bajo en grasa
- 4 huevos
- 400 ml de leche desnatada
- 100 g de stevia o edulcorante natural
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
- Precalentar el horno a 160°C.
- En un bol grande, batir los huevos con la stevia hasta obtener una mezcla espumosa.
- Añadir el queso crema y batir hasta que quede bien incorporado.
- Incorporar la leche y la esencia de vainilla, y mezclar bien.
- Verter la mezcla en moldes individuales para flan.
- Colocar los moldes en una bandeja de horno con agua caliente (baño maría).
- Hornear durante 1 hora, o hasta que los flanes estén firmes.
- Dejar enfriar a temperatura ambiente y luego refrigerar por al menos 1 hora antes de servir.
Creado: 26 de febrero de 2013