Usos del kimchi en la cocina y receta casera
Por: Leire Moneo
Periodista experta en alimentación
Actualizado: 29 de julio de 2022
El kimchi es una receta muy versátil que nos ofrece muchas posibilidades dentro de la cocina, ya que puede utilizarse como un suculento aperitivo, como un acompañamiento o incluso como un plato principal.
“Suele ir acompañado de arroz, o mejor dicho, acompañando el arroz, ya que es un básico en la cocina coreana. En general acompaña muy bien a los platos que llevan almidón, ya que limpia mucho el paladar. Pero las opciones son casi infinitas, ya que, por ejemplo, lo he visto en alguna pieza de maki, en pizzas o como base de una ensalada, mientras que en los restaurantes de Kaiten –donde la comida pasa frente al cliente en cintas transportadoras– también lo sirven muchas veces de tapa”, detallan los chefs del restaurante de fusión asiático-mediterránea Bacira, quienes recuerdan que, “una vez fermentado, se conserva sin problema y lo tienes ya listo para su uso durante un largo periodo de tiempo”.
Sea de la forma que sea, cualquier persona puede tomarlo, ya que, tal y como apunta la dietista-nutricionista Marta Villarino Sanz, “es apto para todos, salvo aquellas personas que tengan una restricción en fibra o sean alérgicas al pescado, excepto si está muy bien especificado que no esté fermentado con el mismo”. Eso sí, si no se ha consumido nunca, los expertos aconsejan comenzar por cantidades moderadas, ya que su elevado número de bacterias Lactobacillus, a pesar de ser beneficiosas para la salud, pueden resultar contraproducentes para el estómago y la flora intestinal si llegan de golpe y en altas cantidades.
Dónde comprarlo y cómo comer el kimchi
El kimchi ha llegado para quedarse. Aunque ya es muy popular entre los foodies, todavía es algo desconocido entre los fogones caseros, a pesar de que los fermentados cada vez están más de moda por sus bondades nutricionales. “En Corea las madres y abuelas lo siguen elaborando, pero ya existen muchas marcas que lo realizan y lo envasan para tenerlo preparado en el supermercado, por lo que en España ya no es difícil encontrarlo en supermercados especializados o aquellos que tengan comidas más variadas de diferentes partes del mundo. El caldo que trae se puede consumir en forma de sopas y se puede mezclar con carnes tipo pollo, fideos e incluso hacer pizza de Kimchi”, recomienda Marta Villarino.
En cualquier caso, es preferible elaborarlo de forma casera, eso sí, es importante realizar de manera completa la fermentación para lograr todos los beneficios. Recuerda que si vas a consumirlo a corto plazo requiere una fermentación a temperatura ambiente, mientras que los tiempos de almacenamiento más largos requieren una fermentación a baja temperatura (5°C).
En cuanto a cómo almacenarlo, puede hacerse de dos formas, ya sea durante tres semanas a 4°C, que se considera que está bien madurado o solo por 3-4 días a temperatura ambiente.
Receta de kimchi: cómo prepararlo
Aunque a priori pueda parecer complicado, los expertos aseguran que se trata de una receta muy sencilla y apta para todos, aunque requiere una buena dosis de paciencia. La espera merece la pena. Toma nota si quieres animarte a hacerla en casa.
Receta de kimchi casero
- 2 coles, a ser posible de la variedad napa
- 500 gramos de harina, preferiblemente de arroz
- 4 ramilletes de cebollinos
- 2 nabos medianos
- 3 vasos pequeños de chile coreano en polvo (gochugaru)
- 1 vaso pequeño de salsa concentrada de anchoas (meulchi aekjeot)
- 8 dientes de ajo
- 50 gramos de jengibre
- 500 gramos de sal gorda
- Lavar bien la col china y cortar las hojas hasta la mitad. A continuación, colocarlas en un recipiente con agua y echar sal gorda entre todas las hojas. Dejar reposar al menos durante cuatro horas.
- Volver a lavar con abundante agua la col para eliminar la sal.
- Picar el ajo, el jengibre con la batidora hasta lograr una pasta compacta.
- En un cazo se mezcla el chile, la harina y un chorrito de agua a fuego lento y removiendo con unas varillas. Cuando tenga textura homogénea se retira y se deja enfriar.
- Cuando esté frío, añadir la pasta de jengibre y ajo. Remover muy bien y añadir el caldo de pescado.
- Añadir el cebollino muy bien picado y el nabo cortado en tiras muy finas.
- Con la pasta homogénea que hemos logrado es el turno de untar las hojas de col previamente lavadas. Es aconsejable utilizar guantes para este proceso.
- Introducir las coles en recipientes de cristal o cerámica y cerrar herméticamente. Dejar reposar en la nevera para que comience la fermentación. Los expertos aconsejan dejar fermentar como mínimo una semana.
Creado: 18 de julio de 2018