El agua potable en México contiene demasiado arsénico

La Organización Mundial de la Salud estableció el límite máximo de arsénico en el agua potable en 0.01 miligramos por litro (mg/L) hace más de 20 años, sin embargo, en México la legislación permite un límite máximo de 0.025 mg/L en el agua para uso y consumo humano, y los mexicanos llevan todo este tiempo ingiriendo más del doble del arsénico recomendado por la OMS.

El arsénico, una sustancia tóxica para la salud que puede aumentar el riesgo de desarrollar enfermedades como cáncer de pulmón, cáncer de mama, de próstata, de riñones, o de hígado, lesiones cutáneas, enfermedades cardiovasculares o diabetes, se encuentra en altos niveles en mantos acuíferos subterráneos de donde procede la mayor parte del agua que se emplea en el país para el consumo humano.

La ingesta de arsénico puede aumentar el riesgo de desarrollar enfermedades como cáncer de pulmón, cáncer de mama, de próstata, de riñones, o de hígado, lesiones cutáneas, enfermedades cardiovasculares o diabetes

En la actualidad, las autoridades sanitarias están elaborando una nueva norma sobre calidad del agua que prevé ajustar la cantidad máxima permitida en México al estándar determinado por la OMS. El problema es que para cumplir la norma es necesario destinar una importante partida económica para adaptar muchas de las plantas potabilizadora del país, e instalar equipos capaces de eliminar el arsénico del agua que se trata en ellas.

Para eliminar el arsénico se utiliza un proceso conocido como osmosis inversa, y para llevarlo a cabo se precisan determinados equipos, cuyo coste máximo estimado es de 140 millones de pesos por planta. Como no todas las plantas potabilizadoras necesitan esta inversión máxima, el cumplimiento de la norma puede alcanzar un coste total algo menor de 15 mil millones de pesos.