Tecnología al servicio del deporte
Actualizado: 2 de diciembre de 2022
No hay duda alguna de que hacer deporte es imprescindible para mantener nuestra salud y prevenir diferentes enfermedades. Cada día, la ciencia y la tecnología tratan de ponernos un poco más fácil la práctica deportiva, y animarnos así a que tracemos un programa de entrenamiento efectivo, responsable, adecuado y, por supuesto, a que lo cumplamos.
La fuerza de voluntad es lo más importante, pero el hecho de poder conocer gracias a novedosos aparatos, gadgets y aplicaciones móviles cómo estamos trabajando y mejorando también hace que nos enganchemos y hasta nos piquemos a seguir esforzándonos para optimizar nuestro rendimiento deportivo y, con ello, nuestra salud.
Las empresas relacionadas con el deporte ya no se limitan a fabricar ropa o calzado y a adaptarlo a nuevas modas o gustos, sino que su gasto en I+D para idear y fabricar nuevos artilugios para mejorar la práctica deportiva no para de aumentar. Toda esta tecnología ha evolucionado a una velocidad impresionante y lo sigue haciendo, desde el pionero en los aparatos tecnológicos relacionados con la práctica deportiva como es el podómetro, hasta la actual irrupción de los smartphones, pulseras de actividad y dispositivos que se benefician de lo último en tecnología y lo ponen al alcance de casi cualquiera.
Controlar el entrenamiento gracias a la tecnología
El mundo del deporte, tanto amateur como profesional, ha sufrido una gran transformación en el siglo XXI. La preparación es mucho más eficiente, ya que todo se puede controlar (velocidad, distancia, pulso…) y el rendimiento es más ajustado a nuestras posibilidades reales, no a aquellas que creemos tener. En la actualidad, todo el que disponga de un teléfono inteligente con conexión a Internet puede saber cuánto ha corrido, qué recorrido ha hecho, la velocidad media que ha llevado e, incluso, puede prepararse un entrenamiento a largo plazo que podrá controlar desde el propio dispositivo.
La tecnología es también una herramienta que nos ayuda a prevenir percances provocados por no saber regularnos al no ser conscientes de cómo está reaccionando nuestro organismo al esfuerzo. Además, el acceso al GPS nos proporciona conocer de antemano el recorrido que vamos a seguir y, de esta manera, evitar problemas o entrenamientos alejados de nuestra capacidad física. Y es que controlar cómo respondemos a cualquier práctica deportiva en el mismo momento que la estamos realizando es básico para saber hasta dónde podemos llegar y conocer cuándo debemos parar cada día.
Creado: 6 de marzo de 2014