Alimentación para recuperarse después de practicar ciclismo
Actualizado: 23 de septiembre de 2022
Al finalizar una carrera ciclista o una competición no hay que relajarse en cuanto a alimentación se refiere, ya que el organismo no sólo necesita recuperarse del esfuerzo realizado sobre la bicicleta, sino que además tiene que prepararse para la próxima salida o entrenamiento, y las necesidades nutricionales del deportista no disminuyen.
Aquellos que sacan la bicicleta puntualmente, y lo hacen solo como una forma de disfrutar del deporte, o para ponerse en forma, no requieren nada más que una dieta equilibrada de la que se eliminen productos como la bollería industrial o la comida rápida. Se trata, por tanto, de llevar una alimentación sana, variada y saludable.
Es muy importante señalar, sin embargo, que lo que nunca deben hacer es no comer nada al finalizar la actividad porque no tengan hambre y piensen que así adelgazarán más. El organismo necesita recuperar hidratos de carbono, proteínas, sales minerales y vitaminas que se utilizan en el ejercicio para evitar problemas de salud como dolores musculares, cálculos renales, cefaleas, estreñimiento, anemia, hipoglucemia, problemas de cicatrización de heridas, insomnio, pérdida de pelo…
En el caso de los ciclistas que han realizado una sesión de ciclismo de alto gasto calórico, se recomienda que tomen hidratos de carbono para recuperar energía. Para ello suele bastar con comer un pequeño bocadillo unos 30 minutos después de terminar el ejercicio, salvo que sea la hora de comer o cenar, en cuyo caso pueden aprovechar para consumir pasta, arroz, pescado, o alguna carne blanca con verduras.
En lo que se refiere a la hidratación, ayuda a recuperarse beber un vaso de agua, de bebida isotónica, o de zumo natural, nada más terminar el ejercicio. Media hora más tarde se puede tomar un vaso de leche –o una ración de otro lácteo– para ingerir aminoácidos esenciales para el funcionamiento del organismo.
¿Es buena o mala la cervecita de después de salir a rodar?
Cada día más ciclistas salen a rodar en grupo, lo que resulta más entretenido, además de proporcionar mayor seguridad en el caso de sufrir una caída, un pinchazo, o cualquier otro problema. Una de las actividades más extendidas en estos grupos es tomarse algo todos juntos al terminar, y muchos optan por sustituir el agua o las bebidas isotónicas por una cerveza. ¿Es adecuado?
La cerveza contribuye a la hidratación del organismo al estar compuesta, entre otras cosas, por agua y electrolitos. Eso sí, siempre que se tome una cantidad pequeña (máximo dos cañas), puesto que también es diurética y beber en exceso provocará más necesidad de orinar, lo que podría favorecer la deshidratación.
La primera opción, sin embargo, debe ser siempre beber agua, y después pasar a tomar una caña (mejor sin alcohol, que tiene menos calorías que la normal). Es cierto que esta bebida, a nivel muscular, puede ayudar a combatir el cansancio o acelerar la recuperación debido a su efecto antioxidante, lo que hará disminuir los tiempos de descanso entre salidas –siendo indiferente para esto que sea con, o sin alcohol–, pero es importante tener claro que, a pesar de sus ventajas, en cuanto a hidratación se refiere se pueden conseguir los mismos resultados con otras bebidas que carecen de contenido alcohólico.
Creado: 16 de noviembre de 2017