Alimentación para mejorar la resistencia física
Actualizado: 28 de junio de 2022
Las personas que quieran maximizar su plan de entrenamiento para mejorar la resistencia deben cuidar también su alimentación, sobre todo los días de ejercicio, ya que habrá un desgaste superior a los 60 minutos. Es importante no olvidarse de que deben pasar unas dos horas o dos horas y media después de una ingesta de comida para realizar el entrenamiento.
El 60% de la dieta que acompañe una buena rutina de entrenamiento de la resistencia debe estar formada por hidratos de carbono complejos que se convertirán progresivamente en glucosa, necesaria para el buen funcionamiento de los músculos. Pan, arroz, pasta, cereales o tubérculos son las fuentes principales.
La proteína también es importante. Su consumo dependerá del peso del atleta, pero rondará en unos 30 gramos diarios por cada 8-10 kilos de peso. Es decir, para una persona que pese 80 kilos deberá tomar algo menos de 300 gramos de proteína al día a través de la carne, pescado, huevo o la leche, siempre prescindiendo de las partes más grasas.
El consumo de grasa debe ser muy bajo, ya que no se trata de una fuente de energía adecuada para el trabajo muscular.
Por supuesto, la hidratación es fundamental. El deportista debe estar correctamente hidratado antes, durante y después del entreno y, si es necesario, se puede completar con alguna bebida isotónica.
Un dietista-nutricionista será la persona indicada para realizar un menú personalizado que se adapte no sólo al plan de entrenamiento, sino también al peso.
Creado: 3 de junio de 2016