Causas del dolor de espalda e higiene postural adecuada
Actualizado: 21 de septiembre de 2022
Lumbalgia, dolor cervical, ciática, tortícolis, contracturas… ¿Quién no ha tenido alguna vez un dolor de espalda? El problema aparece cuando estas molestias se convierten en permanentes, cuando los masajes sólo te calman durante unos días, cuando convives a diario con el dolor.
Causas de dolor de espalda
Según los expertos, el sedentarismo, junto al estrés, son los principales males que sufrimos en el trabajo y los causante de muchos problemas de salud, sobre todo las patologías vinculadas a la espalda. Al estatismo se le suelen sumar posturas inadecuadas y hábitos adquiridos que implican una mala alineación corporal en el espacio y respecto a la actividad que se está llevando a cabo. El resultado, una columna en forma de interrogante y dolores recurrentes bastante fastidiosos.
Hay factores que contribuyen a empeorar la salud de la espalda, como puede ser un mobiliario no adaptado a las necesidades personales, factores ambientales que producen estrés y aumentan la tensión, o problemas de salud de otro tipo –que incluye alteraciones en la vista, oído o patologías previas– que obligan a adoptar una mala higiene postural, torciendo el tronco o la cabeza hacia un lado u otro o para delante.
Además, la falta de fuerza en los músculos de la espalda y del abdomen pueden provocar dolores de cuello y la parte posterior del tronco, pues no tiene las herramientas necesarias ni está preparado para realizar movimientos, cargas o posturas del día a día. Por eso, los expertos recomiendan ejercitar la musculatura de la espalda como medida preventiva.
Las mujeres tienen más riesgo de problemas de espalda
Otra cosa que hay que tener en cuenta a la hora de mantener una buena postura de la espalda es la estética, no resulta agradable visualmente una persona que camina encorvada. Aunque se estima que casi el 80% de la población sufrirá en algún momento un problema de espalda a lo largo de su vida, una realidad que supone una alerta de salud y, además, grandes pérdidas económicas a las empresas en forma de bajas.
Los datos también reflejan que son las mujeres las que más acuden a consulta por este tipo de patologías, pues podría deberse a que algunas de ellas realizan dobles jornadas laborales, en el trabajo y en casa, lo que supone un enorme desgaste físico y mental.
Por qué y cómo fortalecer tu espalda
Como hemos dicho, las malas posturas, el estrés, las lesiones, los sobreesfuerzos físicos, los malos hábitos y hasta el ejercicio inadecuado pueden estar entre las causas de las patologías de espalda. Terapias como la naprapatía, disciplinas como Pilates y medidas como las sesiones de reeducación postural pueden ayudarte a fortalecer la musculatura de esta zona y a tener una espalda sana.
La columna vertebral es el eje de nuestro cuerpo. Fortalecer la espalda, y las zonas adyacentes que la ayudan en su tarea (como los músculos abdominales), y conservar la flexibilidad, te ayudará a evitar problemas en un futuro y te servirá para mejorar tu salud en general.
Deportes que pueden ser lesivos para tu espalda
Tener una espalda sana está directamente relacionado con la tonicidad y elasticidad de tu musculatura. El sedentarismo es tu peor enemigo, pero no todo el ejercicio es recomendable para la espalda, sobre todo si ya tienes alguna patología. Los ejercicios que comportan un impacto directo sobre la columna vertebral pueden empeorar los problemas ya existentes: carrera, danza, baloncesto, fitness de alto impacto, step… Por ello es necesario consultar al médico antes de iniciar cualquier actividad física.
Además de las disciplinas tradicionales, a continuación te presentamos nuevos programas de ejercicio, técnicas y cuidados que mantendrán tu espalda sana y te harán olvidarte del dolor.
Creado: 16 de septiembre de 2011