El viento y la altitud ayudan a batir récords olímpicos
04/08/2012
Más rápido, más alto, más fuerte”, es el lema olímpico bajo el que todos los atletas intentan superarse cada año en busca de medallas y mejores marcas. Pero a tenor de un estudio del Instituto neozelandés de Investigación del Rendimiento Deportivo de la Universidad de Tecnología de Auckland (Nueva Zelanda) tal vez el lema debería añadir un “más viento, más altitud”. Y es que, este trabajo asegura que los factores ambientales son determinantes a la hora de batir récords.
Más concretamente, el trabajo de los neocelandeses ha tomado como base las marcas registrada por el conocido atleta de Jamaica Usain Bolt. De esta manera, se compararon sus tiempos en las Olimpiadas de Pekín, hace cuatro años -cuando hizo su primer récord del mundo, corriendo los 100 metros lisos en tan solo 9,69 segundos-, con el que realizó en los mundiales de atletismo celebrados en la capital alemana un año después, cuando corrió la misma distancia en 9,58 segundos.
Un viento a favor de dos metros por segundo podría hacer rebajar el tiempo de un velocista de 0,07 a 0,09 segundos en los 100 metros lisos
Además, se tuvo en cuenta los factores ambientales que pudieron tener influencia en dichas marcas, aparte del entrenamiento, talento y cualidades físicas y psicológicas que Bolt atesoraba en ese momento. Entre estos factores se valoró si la prueba se realizó bajo techo o al aire libre, la altitud respecto al mar del lugar donde se encontraba la pista, la responsabilidad o reconocimiento de la competición y el cronómetro con el que se midió el tiempo realizado. Pues bien, después de tener en cuenta estas vicisitudes, se llegó a la conclusión que la diferencia principal entre el primer tiempo y el segundo estuvo en el viento. Así, mientras en la prueba que corrió en las Olimpiadas de China no hubo viento apreciable, en los campeonatos alemanes se registró un viento a favor de 0,9 metros por segundo.
Esta respuesta hizo que los investigadores se pusieran manos a la obra y analizaran más de 40.000 resultados de algo más de 600 atletas diferentes. Las conclusiones fueron que un viento a favor de dos metros por segundo -velocidad máxima a partir de la cual se invalidan los tiempos de los atletas- podría hacer rebajar el tiempo de un velocista de 0,07 a 0,09 segundos en los 100 metros lisos.
El otro factor que puede mejorar las marcas de los velocistas es la altitud, ya que parece cuánto más alta sea más rápido se puede correr en distancias cortas. Esto se debe a que la resistencia del aire es menor. Lo contrario ocurre en distancias de fondo, donde los tiempos analizados fueron menores en las pruebas con más altitud, entre otras cosas porque una mayor altitud reduce el oxígeno y consecuentemente la potencia aeróbica del deportista.
Por todo ello, estos expertos creen que corriendo con una velocidad de viento de 2 metros por segundo y con una altitud de 999 metros, el propio Bolt podría pulverizar su récord del mundo, dejándolo en 9,48 segundos.
Actualizado: 19 de octubre de 2016