Sangrado en el primer trimestre del embarazo, ¿cuándo preocuparse?

Los sangrados o pérdidas de sangre en el primer trimestre del embarazo es probablemente la mayor preocupación de las embarazadas al comienzo de la gestación. Ir al baño y observar en la ropa interior que hay una pequeña mancha de color rojo o amarronado es un mazazo. Provoca una gran desazón… y con motivo, ya que es uno de los síntomas de pérdida del embarazo. Sin embargo, no siempre tiene que ver con un aborto espontáneo o una amenaza de aborto. “No siempre que existe un sangrado quiere decir que la gestación se va a interrumpir. Si bien es un signo que no se debe obviar, la mayoría de las pacientes que presenta manchados durante el primer trimestre suele presentar embarazos normales posteriormente”, explica la Dra. Carmen Martín Blanco, ginecóloga del Hospital Nuestra Señora del Rosario, de Madrid.

El primer signo que te dirá si esa pérdida de sangre pone en peligro o no tu embarazo es la cantidad de sangre. Por eso, conviene que sepas distinguir entre manchado y sangrado. “La diferencia fundamental es la cuantía. Cuando nos referimos a un manchado es un sangrado escaso, intermitente, en ocasiones más denso o marronáceo. A veces, puede estar mezclado con el flujo vaginal, dándole un color rosado. Cuando nos referimos a un sangrado vaginal la cantidad es mayor, como una regla”, apunta la doctora Martín Blanco.

Causas del sangrado en el primer trimestre del embarazo

Sí, a ti te parece que ese sangrado que has visto al limpiarte después de ir al baño es algo excepcional. Y para ti lo es sin duda: es tu embarazo. Pero tener un sangrado en las primeras semanas de la gestación es un hecho muy común. Se calcula que en entre un 5% y un 25% de todos los embarazos se produce una pérdida de sangre vaginal. Pero, ¿a qué puede deberse este sangrado? La Dra. Carmen Martín Blanco nos explica cuáles son las causas de hemorragia vaginal en los primeros tres meses del embarazo:

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  Implantación del embrión en el endometrio

  A este sangrado también se le conoce como falsa regla: al producirse entre las semanas 4 y 6 de gestación, cuando la mujer a veces desconoce su estado, muchas creen que se trata de la menstruación; eso sí, un poco rara. “Si bien ningún sangrado en el embarazo se considera normal, a veces se puede producir un pequeño manchado conocido como sangrado de implantación cuando ocurre la implantación del embrión en el endometrio, al romperse pequeños vasos sanguíneos presentes en este”, afirma la Dra. Martín Blanco.

  • ¿Cómo es el sangrado? “Más leve que el menstrual y de cantidad leve e intermitente. En ocasiones es un sangrado oscuro, casi marrón”, dice la ginecóloga.

  • ¿Cuánto dura? De uno a tres días.

  • ¿Es peligroso para el embarazo? No. este tipo de sangrado no supone un peligro para el embarazo.

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  Hematoma uterino

  “Se trata de hematomas o acúmulos de sangre que se forman al producirse un sangrado dentro del útero”, señala la ginecóloga Martín Blanco. A veces, al mismo tiempo se produce una pérdida de sangre vaginal, pero no siempre es así. Es muy común que se descubran al realizar una ecografía de control. “Pueden ser asintomáticos o presentarse con un cuadro de sangrado vaginal o dolor abdominal”, añade. Puede formarse entre el tejido que forma la placenta o el tejido coriónico y la capa interna del útero.

  • ¿Cómo es el sangrado? Es muy variable y en ocasiones puede incluso no presentarse.
  • ¿Cuánto dura? El sangrado uterino relacionado con los hematomas uterinos puede ocurrir durante un solo día o “llegar a durar semanas si el hematoma es muy grande, hasta su resolución completa”, observa la doctora.
  • ¿Es peligroso para el embarazo? La mayoría de los hematomas intrauterinos, alrededor del 70%, desaparece sin más. “Los hematomas pequeños suelen tener una evolución favorable y se reabsorben espontáneamente desapareciendo en pocos días”, explica la Dra. Martín Blanco. Pero no siempre es así y deriva en un aborto espontáneo. Según dónde se localice el hematoma y su tamaño, será más o menos grave. Así:

    • Los hematomas retroplacentarios se forman entre la placenta y el endometrio y tienen más riesgo de aborto.

    • Los subcoriónicos se forman entre la membrana más externa que rodea al embrión y el endometrio. Son los más comunes y en la mayoría de los casos desaparecen sin más.

    • Los supracervicales “son los de mejor pronóstico y suelen eliminarse por la vagina en forma de sangrado.

  • ¿Tiene tratamiento? En los hematomas grandes se toman como medidas preventivas el reposo absoluto, la abstinencia sexual, y en algunos casos se prescriben los óvulos o comprimidos de progesterona y, en los casos más graves, la hospitalización de urgencia”, dice la doctora Carmen Martín Blanco”

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  Amenaza de aborto

  En la amenaza de aborto, el embrión tiene latido, pero los síntomas que presenta la mujer hacen sospechar que la correcta evolución de la gestación está en peligro.

  • ¿Cómo es el sangrado? “La amenaza de aborto suele presentarse como sangrado vaginal, escaso (raramente en cantidad similar a una menstruación), acompañado o no de dolor abdominal, de tipo cólico o continuo, y a veces también en un lateral”, señala la Dra. Martín Blanco.

  • ¿Es peligroso para el embarazo? Cuando el médico le dice a una mujer que tiene amenaza de aborto, su primera pregunta, sin duda, es: “¿Qué puedo hacer para no perder a mi bebé?”. Según el tipo de sangrado, la sintomatología asociada y la presencia o no de hematomas, recomendará reposo absoluto o relativo y no mantener relaciones sexuales, o incluso la hospitalización. Sin embargo, hay que tener claro que no en todos los casos estas medidas van a servir para que el embarazo siga adelante. Si se va a producir un aborto porque el embrión tiene graves alteraciones cromosómicas, no hay nada que lo pare. Ni tan siquiera permanecer en la cama sin moverse. No está claramente demostrado que el reposo mejore el pronóstico en caso de amenaza de aborto, lo que si está claro es que la actividad física en el contexto de un aborto incipiente es perjudicial. Si con el reposo, el sangrado cede y el embarazo sigue su curso normal… ¡enhorabuena! El riesgo ha pasado y una vez que el peligro de perderse una gestación ha desaparecido, la mujer puede realizar una vida normal de embarazada.

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  Aborto espontáneo

  “Cuando existe un aborto los síntomas característicos asociados suelen ser sangrado en cantidad creciente”, señala la Dra. Martín Blanco. Junto al sangrado aparecen otras señales, como “dolor abdominal en hipogastrio, es decir, cerca del pubis. También es característico la desaparición de síntomas relacionados con el embarazo (náuseas, tensión mamaria…)”, añade.

  • ¿Cómo es el sangrado? Generalmente es un sangrado que cada vez va a más.

  • ¿Es peligroso para el embarazo? Siempre supone la pérdida de la gestación. Es un proceso imposible de detener. En ocasiones, el organismo materno expulsa por sí mismo el embrión y la incipiente placenta pero, si no es así, se administra medicación para favorecer la expulsión o se practica un legrado.

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  Embarazo ectópico

  En este caso el embrión se implanta fuera del útero, generalmente en las trompas de Falopio, pero también en un ovario, en el cuello uterino, o incluso en la cavidad abdominal. Cuando alcanza unos 3-4 cm rompe la trompa, el ovario o el cuello uterino, provocando una fuerte hemorragia y el aborto espontáneo. “Cuando existe un embarazo ectópico además del sangrado aparecen otros síntomas como dolor abdominal en la zona baja del estómago. En ocasiones, si el ectópico se ha complicado por la rotura de la trompa, este dolor puede ser muy intenso y punzante, pudiendo producir náuseas, vómitos, mareo, o incluso pérdida de conocimiento si se produce un sangrado intraabdominal. En cualquiera de estas situaciones lo indicado es acudir a un servicio de Urgencias”, advierte la Dra. Martín Blanco.

  • ¿Cómo es el sangrado? Una fuerte hemorragia, que suele producirse hacia la semana 6ª de embarazo. Antes, el embrión es demasiado pequeño para que provoque algún daño.

  • ¿Es peligroso para el embarazo? Sí, provoca un aborto espontáneo y además puede poner en peligro la vida de la madre.

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  Embarazo molar

  Es una de las causas de sangrado vaginal acompañado de dolor o sensación de presión pélvica…, y una situación muy angustiosa para la mujer porque experimenta todas las señales típicas del embarazo. Incluso el test da positivo. Pero en realidad no se encuentra en estado. “Engloba diferentes procesos, benignos y malignos, que en su inicio se pueden confundir con un embarazo normal. Las pacientes pueden tener los mismos síntomas, hasta que empiezan los signos de la enfermedad”, afirma la Dra. Martín Blanco. Todo empieza con un embrión defectuoso por anomalías cromosómicas. Cuando se empieza a dividir y a formar el trofoblasto (lo que un futuro sería la placenta), ese tejido tiene un crecimiento anormal, causando un embarazo molar.

  • ¿Cómo es el sangrado? Suele causar pérdidas intermitentes.

En caso de sangrado vaginal, ¿hay que acudir a Urgencias?

Cuando una embarazada encuentra su ropa interior manchada de sangre, lo primero que se le viene a la cabeza es si debe o no acudir inmediatamente a Urgencias para que la examinen. Como nos indica la ginecóloga Carmen Martín Blanco “Si el manchado es leve y autolimitado, sin otros síntomas, no sería necesario acudir al médico urgentemente y podría realizar su seguimiento de manera habitual”. Es decir, si un día te encuentras unas gotas de sangre en tu ropa interior y no hay más pérdidas, y no te duele la tripa, no hace falta que salgas corriendo.

Pero hay determinadas circunstancias que sí se pueden considerar una urgencia, como:

• Sangrado abundante.
• Manchado de carácter constante, aunque sea poco.
• Se da al mismo tiempo dolor abdominal.
• Existen secreciones vaginales o leucorrea con mal olor.

“Entonces lo recomendado es que la paciente sea valorada por un ginecólogo para descartar posibles complicaciones”, afirma la doctora Martín Blanco.

Reposo en el embarazo en caso de sangrado, ¿cuándo es necesario?

Cuando la mujer empieza a manchar, se pregunta si debe realizar reposo absoluto (solo se puede levantar de la cama para ir al baño, a asearse y poco más) o reposo relativo (te puedes levantar de la cama, dar paseos muy cortos, pero no realizar esfuerzos físicos o levantar peso). El ginecólogo te aconsejará la medida adecuada en función del tipo de sangrado:

• Si el sangrado es muy leve: “No es necesario guardar un reposo absoluto. En estos casos suele estar recomendado un reposo relativo evitando el ejercicio físico y las relaciones sexuales”, recomienda la ginecóloga del Hospital Nuestra Señora del Rosario.
• Si el sangrado es abundante y en la ecografía se perciben grandes hematomas: “Está recomendado el reposo absoluto para evitar que el sangrado vaya a más en la medida de los posible”, apunta la Dra. Martín Blanco. El organismo con el ejercicio físico y sobre todo con la actividad sexual libera prostaglandinas. Estas además se encuentran en el semen. Tienen muchas funciones, y una de ellas es la de producir contracciones uterinas, que pueden ablandar el cérvix.