Faringitis
El tabaco, el alcohol y las comidas muy calientes pueden lesionar la mucosa faríngea y favorecer la aparición de faringitis, una afección frecuente que provoca dolor de garganta, molestias al deglutir y fiebre. Aprende cómo aliviarla.

Prevención de la faringitis

Por: María Dolores Tuñón

Médico Residente de Medicina Familiar y Comunitaria

Por: Dr. José Antonio Nuevo González

Especialista en Medicina Interna. Servicio de Urgencias del Hospital Gregorio Marañón de Madrid

Actualizado: 22 de septiembre de 2022

Si queremos evitar esta molesta inflamación, en primer lugar, deben evitarse los agentes que pueden lesionar la mucosa faríngea, tales como el alcohol, el tabaco o las comidas muy calientes. Para prevenir la faringitis, es también muy importante el control adecuado de las enfermedades que pueden favorecer su aparición, como la diabetes mellitus, o las dislipemias.

PUBLICIDAD

Se debe limitar el contacto con las secreciones faríngeas mediante el uso de guantes por parte del dentista, lavado de manos, y evitando compartir tazas o utensilios para comer con personas enfermas.

Además, existe una vacuna para el virus de la gripe, que va a prevenir la infección por dicho virus. Tomar precauciones al mantener relaciones sexuales, será también muy importante para evitar la infección por gonorrea o sífilis.

Prevención de la faringitis

Para prevenir los casos de faringitis irritativa por reflujo gastroesofágico se pondrán en marcha las medidas conocidas para este fin:

  • Evitar comidas copiosas y grasas, o picantes.
  • No tomar cafeína, bebidas gaseosas, ni alcohol.
  • Prescindir del consumo de menta o de chocolate.
  • Evitar tumbarse hasta pasadas dos horas tras cada comida.
  • Elevar el cabecero unos 10 cm.

PUBLICIDAD

La prevención de esta inflamación, en los casos infecciosos, es fundamental para evitar el desarrollo de sus complicaciones. En este sentido, la incidencia de fiebre reumática en la actualidad es mínima, debido principalmente al tratamiento adecuado de las infecciones bacterianas. 

También conviene recordar que la automedicación antibiótica por esta afección no es recomendable, pues puede conllevar tratamientos innecesarios y originar una selección de gérmenes que provoque resistencias para futuros tratamientos.

PUBLICIDAD

PUBLICIDAD

PUBLICIDAD