Niveles bajos de vitamina D se asocian con una mayor incidencia de hipertensión en la raza negra
29/04/2011
Investigadores de la Universidad de Rochester, en Estados Unidos, han descubierto que los bajos niveles de vitamina D que presentan las personas de raza negra podrían ser un poderoso factor que contribuyese a la aparición de las diferencias raciales que existen respecto a la hipertensión, un problema más común y a menudo más mortal entre la población de raza negra que entre la de raza blanca.
Estos descubrimientos, publicados en la edición on line de Journal of General Internal Medicine, concuerdan con la teoría, que cada vez cuenta con más evidencias, de que unos niveles bajos de vitamina D están asociados con la hipertensión y que las personas de raza negra producen menos vitamina D.
El equipo del profesor de Medicina de Familia de la URMC, Kevin Fiscella, líder de este trabajo, analizó los datos procedentes de la Encuesta Nacional de Salud y Examen Nutricional 2001-2006, incluyendo en la muestra a 2.000 pacientes negros y 5.100 blancos no hispanos, de 20 años o más. Los investigadores compararon la presión sistólica media y los niveles de vitamina D en sangre de los participantes del estudio.
Descubrieron que el 61% de los pacientes negros, en comparación con el 11% de los blancos, presentaban niveles de vitamina D en los niveles más bajos, mientras que sólo el 2% de los pacientes negros frente al 25% de los blancos tenían niveles de vitamina D en los niveles más altos.
"Este estudio confirma que la vitamina D representa una pieza del complejo puzzle que componen raza y presión sanguínea", señala Fiscella, quien apunta que, "dado que las diferencias entre blancos y negros respecto a la presión sanguínea suponen cientos de muertes por enfermedades cardíacas e ictus entre personas de raza negra, creemos que simples intervenciones -como tomar suplementos de vitamina D- podrían tener un impacto positivo en las diferencias raciales".
No obstante, Fiscella reconoce que su estudio tiene algunas limitaciones y que la vitamina D no explica totalmente las diferencias raciales respecto a la hipertensión. Por ello, dice, "es probable que otros factores más allá de la vitamina D, como el estrés psicológico, la adherencia a los tratamientos y la discriminación, podrían contribuir a la existencia de esta disparidad", y advierte que "serán necesarios más estudios que empleen medidas más refinadas que el color de la piel, para aclarar la compleja relación entre el tipo de piel, el estrés, la vitamina D y la hipertensión.
La importancia de la vitamina D
La mayoría de la vitamina D es producida por la piel en respuesta a la luz del sol y metabolizada en el hígado, donde se convierte en 25 hidroxivitamina D o 25(OH) D, que es la forma en que se determina el estatus de vitamina D de una persona a través de un análisis de sangre. La deficiencia se suele definir como menos de 20 nanogramos por milímetro (Ng/ml); tener menos de 15 Ng/ml es inadecuado para mantener sanos los huesos y el normal metabolismo del calcio.
Mucha gente en todo el mundo presenta bajas concentraciones de vitamina D. Determinados factores genéticos comunes a las personas de raza negra, como el color oscuro de la piel, reducen la síntesis de vitamina D. Además, la mayor incidencia de intolerancia a la lactosa que presentan las personas de raza negra, que pueden eliminar la leche enriquecida con vitamina D de la dieta, contribuye a una menor ingesta dietética, que investigaciones anteriores ya habían demostrado.
Fuente: EUROPA PRESS
Actualizado: 20 de junio de 2018