Hipoglucemia, qué es y causas
Actualizado: 27 de mayo de 2024
¿Qué es la hipoglucemia y a qué se debe?
La hipoglucemia es un estado patológico que consiste en un nivel anormalmente bajo de glucosa (azúcar) en sangre, considerándose anormal una concentración de glucosa inferior a 60-70mg/dl en la sangre que puede afectar a las funciones corporales. Esta disminución se puede producir debido a tres circunstancias:
Hipoglucemia diabética
Es una condición que puede ser potencialmente peligrosa y requiere atención inmediata. Este es un trastorno relativamente común en personas diabéticas. La diabetes es una enfermedad que consiste básicamente en la situación opuesta a la hipoglucemia, es decir, las personas diabéticas presentan una concentración demasiado elevada de glucosa en la sangre, debido a una deficiencia en la producción de insulina por parte del páncreas (diabetes tipo I o diabetes juvenil), o a una respuesta inadecuada a la misma por parte del organismo (diabetes tipo II).
El tratamiento de esta enfermedad se basa en la administración de insulina o fármacos que faciliten la captación de la glucosa por las células. Sin embargo, un individuo diabético puede padecer un episodio de hipoglucemia si:
Los bebés neonatos hijos de madres diabéticas presentan con frecuencia niveles muy bajos de azúcar en sangre al nacer.
Hipoglucemia: azúcar e insulina, cómo se regulan en la sangre
Los azúcares tienen un papel principalmente energético en el organismo. Son imprescindibles para que los músculos, el cerebro y otros órganos y tejidos puedan llevar a cabo su actividad normal. La glucosa es el principal azúcar utilizado por las células de nuestro organismo para obtener dicha energía; y la fuente principal de glucosa son los alimentos y, en concreto, los hidratos de carbono (el organismo también fabrica ciertas cantidades de glucosa a partir de otros compuestos).
De modo que uno de los objetivos de la alimentación es mantener unos niveles de glucosa en la sangre adecuados a los requerimientos de nuestros órganos y tejidos. Cuando comemos, por ejemplo, un plato de pasta, esta irá siendo degradada en compuestos cada vez más pequeños, que finalmente podrán ser absorbidos en el intestino. Uno de estos compuestos es la glucosa. Tras su absorción en el intestino, y antes de pasar a la circulación general, este azúcar será transportado hasta el hígado, donde una parte quedará almacenado en forma de glucógeno (compuesto formado por varias cadenas de glucosa). La glucosa que no se ha almacenado saldrá del hígado y será transportada por la sangre para nutrir todas las células del cuerpo.
En un momento dado el nivel de azúcar en la sangre puede disminuir, bien sea porque llevamos tiempo sin comer, o porque hemos realizado un esfuerzo que requería esa energía. Si en ese momento no ingerimos alimentos que aporten la glucosa necesaria para cubrir esa falta, en el hígado comenzará a degradarse el glucógeno, y la glucosa obtenida de este proceso pasará a la sangre y alcanzará de nuevo la concentración necesaria para alimentar nuestros tejidos. Podría decirse que la reserva hepática es un sistema de seguridad bastante eficiente.
Además del hígado, el cuerpo humano tiene otro almacén de glucosa, los músculos. A diferencia de la reserva formada en el hígado, la reserva muscular es en principio de uso exclusivo para este tejido.
La insulina
Para que el azúcar que se encuentra en la sangre pueda ser utilizada por el organismo es necesario que el cuerpo segregue insulina, que es una hormona sintetizada en el páncreas, que permite que las células capten la glucosa que se encuentra en la sangre. Esta hormona es liberada cuando se produce un aumento del nivel de glucosa en la sangre, es decir, tras la ingesta de alimentos. También existe una pequeña cantidad que se libera de forma más regular durante los periodos de ayuno.
Causas de la hipoglucemia y factores de riesgo
Con todo lo dicho hasta ahora, y aunque las causas de la hipoglucemia pueden variar, estas son en resumen algunas de las más comunes:
- Medicamentos para la diabetes: las personas con diabetes tipo 1 o tipo 2 que toman insulina u otros medicamentos orales para la diabetes, como las sulfonilureas y las meglitinidas, para reducir el azúcar en sangre pueden experimentar hipoglucemia si la dosis es demasiado alta o si no comen lo suficiente después de tomar el medicamento.
- Ayuno prolongado: no comer durante un período prolongado o saltarse comidas puede llevar a una disminución significativa de los niveles de glucosa en sangre. La hipoglucemia ligada a un periodo de ayunas suele ocurrir cuando una persona pasa 8 horas o más sin comer.
- Ingesta insuficiente de carbohidratos: consumir menos carbohidratos de los necesarios puede llevar a una bajada en los niveles de azúcar en sangre.
- Ejercicio excesivo: el ejercicio intenso o prolongado sin una adecuada ingesta de carbohidratos antes o después puede causar una caída en los niveles de azúcar en sangre hasta 24 horas después de haber realizado el ejercicio.
- Consumo de alcohol: beber alcohol en exceso, especialmente con el estómago vacío, puede interferir con la capacidad del hígado para liberar glucosa en la sangre y desencadenar en algunos casos el proceso hipoglucémico. Las bebidas que contienen etanol provocan un aumento de la producción de insulina; si el individuo lo ingiere en un estado de ayuno prolongado, se consumirán las reservas de azúcar y existirán muchas posibilidades de que sufra una fuerte bajada de glucosa. No es necesario un consumo elevado para producir esta situación, que puede ocurrir tanto en individuos alcohólicos crónicos como en pacientes sanos.
- Enfermedades y condiciones médicas: se estima que en uno de cada diez casos se debe a algunas enfermedades, como problemas hepáticos, renales –pueden alterar la eliminación de medicamentos para la diabetes–, insuficiencia cardíaca o ciertos tumores pueden afectar la regulación de la glucosa (como el insulinoma).
- Trastornos hormonales (problemas con las glándulas suprarrenales o la hipófisis): las personas que padecen ciertas alteraciones endocrinas son susceptibles a presentar episodios hipoglucémicos. Son factores de riesgo de la hipoglucemia en estos pacientes:
- Hipopituitarismo: producción anormalmente baja de las hormonas secretadas por la hipófisis. La hipófisis, o glándula pituitaria, controla la actividad de otras muchas glándulas secretoras, de modo que su alteración provoca trastornos en diversos puntos del metabolismo.
- Hipotiroidismo: déficit de la actividad de la glándula tiroidea. El hipotiroidismo puede venir dado por un fallo en la hipófisis, encargada de regular su actividad, o por un fallo en la propia glándula tiroides. La principal hormona segregada por esta glándula es la tiroxina, que es necesaria para mantener la tasa metabólica basal (tasa metabólica en reposo) dentro de los niveles adecuados.
- Hipoadrenalismo: disminución de la actividad de la glándula suprarrenal. La adrenalina es una hormona que en determinados momentos se encarga, entre otras cosas, de incrementar los niveles de glucosa en la sangre mediante su acción sobre el hígado y los músculos; si no se encuentra presente en la cantidad y en el momento adecuado, el organismo no recibirá el aporte de glucosa que precisa.
Otros factores de riesgo de hipoglucemia
Estos son otros factores que pueden elevar el riesgo de aparición de hipoglucemia:
- Edad avanzada: las personas mayores pueden tener un mayor riesgo debido a la disminución de la capacidad de reconocer y responder a los síntomas de hipoglucemia.
- Historial previo de hipoglucemia: las personas que han experimentado episodios previos de hipoglucemia pueden tener un mayor riesgo de recurrencia.
- Estrés: el estrés físico o emocional puede afectar los niveles de glucosa en sangre.
Creado: 1 de febrero de 2011