Alimentación e higiene del dálmata

Una buena alimentación es muy importante en cualquier perro, pero en el dálmata podría decirse que lo es aún más. La salud de su piel y de su pelo depende en gran medida del pienso que le demos. Por ello, es importante que invirtamos en darle una buena comida.

Es frecuente que esta raza padezca problemas cutáneos, como es la piel atópica y afecciones relacionadas con el ácido úrico. Por ello, es aconsejable que su pienso no contenga carnes rojas ni pollo. Lo mejor, en muchos casos, es darle piensos compuestos de salmón y patata.

El dálmata es, por naturaleza, un glotón. Este tipo de perro nunca se sacia. Por ello, aunque veamos que nuestro amigo seguiría comiendo, hay que darle solo la cantidad recomendada por su peso y edad. Una información que puede ofrecernos el veterinario o que podemos encontrar en el envase del pienso.

Una buena hidratación es fundamental en un dálmata. Este siempre debe tener disponible un cuenco de agua fresca. Recordemos que es un perro muy activo, por lo que necesita grandes cantidades de agua. Es importante que el cuenco sea grande, con capacidad de tres litros como mínimo, y que cambiemos el agua a diario.

Cómo debe ser la higiene de los dálmatas

No es muy recomendable lavar a este tipo de perro muy a menudo, los especialistas recomiendan hacerlo una vez al mes aproximadamente. Para que su pelo luzca brillante y suave, además de darle un buen pienso, lo mejor es cepillarlo cada día con un peine específico para dálmatas (de púas cortas) y lavarlo con champús suaves y recomendados para pieles sensibles.

Asimismo, el dálmata suele padecer otitis. Por lo que una limpieza frecuente de los oídos es muy aconsejable. Ello puede hacerse semanalmente mediante una gasa y el producto de limpieza que nos aconseje el veterinario.