Alimentación e higiene del husky siberiano

Como buen omnívoro que es, la alimentación del husky siberiano puede basarse en carnes, pescados, frutas y verduras. Sin embargo, lo ideal es ofrecerle pienso completo seco y específico en función de su edad, tamaño y sexo. De esta forma evitaremos posibles problemas en el futuro con la dentadura (es muy habitual que aparezca sarro con los alimentos blandos) y, por tanto, disminuya la calidad o esperanza de vida del animal. Esto no quiere decir que no le podamos dar de nuestra comida, pero mejor si lo consideramos como un premio puntual que como una forma de alimentación habitual.

Se recomienda que los machos ingieran entre 1.250 y 1.500 calorías diarias, y las hembras algo menos, entre 1.050 y 1.350. Para saber la cantidad bastará con leer las recomendaciones del fabricante del pienso, las cuales no deben sobrepasarse nunca, ya que una dosis mayor puede provocarles diarrea.

El perro debe seguir una dieta rica en proteínas animales y grasas, así como vegetales, teniendo en cuenta siempre que no digieren bien la soja. De cachorro, durante sus primeros cuatro meses de vida, repartiremos su comida en cuatro dosis. Después, y hasta el año y medio, las reduciremos a tres. A partir de entonces comenzaremos a repartirle la comida en dos veces al día, con una separación de al menos ocho horas entre una toma y otra, retirando siempre el sobrante para evitar posibles problemas de comportamiento: el husky debe entender que el dueño es el líder y, por tanto, es quien le ofrece el alimento; si lo tiene siempre a su disposición será complicado que entienda quién es el líder de la manada.

Higiene y limpieza del husky siberiano

En cuanto a la higiene, el husky siberiano es un perro bastante limpio y fácil de mantener en buenas condiciones. Bastará con un cepillado semanal con un cepillo de púas metálicas para favorecer el mantenimiento del manto de pelo. Mejor si le acostumbramos desde cachorro y lo hacemos como una parte más de nuestra rutina.

Es tan pulcro que no necesitará un baño demasiado a menudo, bastará con hacerlo una vez al mes, en casa o en un centro especializado, con un champú hidratante especial para perros que tenga un pH similar al de su piel (pH 7). Es importante que la piel esté hidratada, ya que de lo contrario pica, el perro se rasca, y no sólo provoca que el pelo se anude sino que, además, pueden aparecer heridas. Sí es importante tener en cuenta que cuando el husky atraviesa una época de cambio de pelo (pasan por dos al año) es aconsejable cepillar más a menudo al animal e, incluso, bañarlo con agua caliente al menos una vez por semana para eliminar el pelo muerto y preparar la piel para el nuevo pelo.

Debemos prestar especial atención a sus almohadillas, sobre todo si el animal vive en un entorno natural, asegurándonos de que no tenga heridas ni nada clavado en ellas que pueda generarle problemas o molestias. Ni que decir tiene que deberemos acudir al veterinario cuando sea preciso para que le administre las vacunas y desparasitaciones, o ante cualquier tipo de problema.