Alimentación e higiene del teckel
Actualizado: 22 de septiembre de 2022
La alimentación del teckel no requiere grandes complicaciones: pienso seco de tamaño pequeño y que sea específico para la edad del perro. Es recomendable evitar los alimentos blandos para prevenir en la medida de lo posible la acumulación de sarro o problemas dentales derivados de un abuso de ese tipo de comida. Evitaremos ofrecerle huesos o restos de nuestra comida.
Una buena alimentación de nuestra mascota durante toda su vida, especialmente a lo largo del primer año, es fundamental para el desarrollo satisfactorio de las funciones vitales, unos huesos fuertes, una visión sin problemas, y un pelo y unos dientes sanos, así como para evitar las enfermedades que acarrea una mala alimentación como, por ejemplo, la obesidad o la diabetes.
Hay que tener en cuenta que cuando se desteta al teckel, nunca antes de las ocho semanas de vida, debemos darle tres veces al día de comer retirando siempre el recipiente un rato después de que haya terminado. Será a partir de los seis meses cuando ya podremos empezar a darle de comer dos veces al día. Si en algún momento queremos cambiar el tipo de pienso del animal, bien porque no estamos convencidos con él, o bien porque cambiamos de etapa vital, lo ideal es hacerlo de manera progresiva durante al menos diez días. Primero mezclaremos un poco de la nueva comida con la habitual, e iremos aumentando esta dosis hasta que hayamos cambiado de pienso.
Higiene y limpieza del teckel
En el caso de los teckel no debemos preocuparnos por su mantenimiento estético, ya que no es nada exigente si lo comparamos con otras razas: no requiere corte, y basta con lavarlo cada mes y medio o dos meses. Bastará con cepillarlo una o dos veces a la semana para que el pelo esté brillante y retirar la suciedad acumulada del día a día y el pelo muerto.
En cuanto a los ojos, debemos tener cuidado ya que suelen aparecer legañas a su alrededor, por lo que es aconsejable limpiarlos con un paño húmedo. Hay que evitar que estas sustancias se acumulen, ya que pueden molestarle y al frotarse los ojos con la pata se puede ocasionar heridas o problemas.
Debemos prestar atención también a sus orejas, ya que al tenerlas caídas además de acumular la suciedad habitual pueden servir de escondite a parásitos externos. Si vemos que el interior acumula cera la retiraremos con cuidado de no dañar el conducto auditivo ayudándonos de una gasa o bastoncillo. Si no estamos seguros de hacerlo correctamente lo mejor es dejarlo en manos del veterinario, o avisar en el centro en el que solamos bañarlo para que lo revisen.
En cuanto a la salud bucodental observaremos que no se acumule sarro o aparezcan caries en la boca del animal. Podemos cepillar desde cachorro los dientes de nuestro compañero con un cepillo específico para perros, ayudándonos de algo de pasta o algún tipo de spray que también estén indicados para perros.
Creado: 16 de marzo de 2016