Guacamayo
El guacamayo es un ave muy popular como mascota por su llamativo y colorido plumaje, su inteligencia (es capaz de aprender y comprender hasta 30 palabras), y porque puede vivir más de 50 años.

Alimentación e higiene del guacamayo

Alimentación e higiene del guacamayo

Los guacamayos pueden comer de todo, excepto aguacate, perejil y chocolate. Además, les encanta divertirse abriendo frutos secos con cáscara.

Por: Natalia Castejón

Periodista especializada en vida saludable

Actualizado: 21 de septiembre de 2022

El guacamayo pertenece al grupo de los omnívoros, come casi cualquier cosa: carne, verduras, insectos, etcétera. La mejor dieta será una variada y que le proporcione vitaminas y minerales. Existen en el mercado piensos que contienen todo lo necesario para estos animales, pero es recomendable añadir algo de fruta y verdura, y que estos alimentos constituyan al menos un 20% de su alimentación.

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También se le pueden suministrar frutos secos (se divertirá quitando la cáscara), o algunas semillas secas, como las de girasol, calabaza o trigo, que le aportarán gran cantidad de aceites. Puedes ofrecerle casi cualquier cosa que tú comas, excepto chocolate, perejil y aguacate, que son tóxicos para ellos.

Estas aves necesitan entretenerse, y para ello puedes ponerle algunos juguetes en la jaula, teniendo mucho cuidado de que no contengan piezas pequeñas que puedan hacer daño al guacamayo. Apuesta por uno o dos juguetes robustos, no más, elaborados con madera no tóxica o tela, e intenta colgarlos cerca de los barrotes de la jaula, y no en zonas en las que puedan interferir sus movimientos. Cada cierto tiempo sustituye los juguetes para evitar que presenten material desgastado que pueda herir al animal.

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Cómo limpiar un guacamayo

La higiene de los guacamayos corre de su cuenta, es decir, basta con ponerles un recipiente con agua tibia para que mojen sus plumas. Muchos de estos animales disfrutan metiéndose en el agua, pero otros no se sienten seguros. A los segundos se les debe rociar con agua en spray y ellos mismos se encargarán de limpiarse. En ningún caso se les deben frotar las alas con una toalla, ya que podría dañarse la barrera natural que forman sus plumas.

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Creado: 23 de octubre de 2015

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