Cuándo necesitas suplementar con vitaminas la dieta de tu perro o gato
Por: Elena Romero García
Veterinaria especialista en medicina de pequeños animales
Actualizado: 23 de septiembre de 2022
Cuando la alimentación de los perros y los gatos se realiza con piensos comerciales adecuados a su edad y condición sanitaria, no es necesaria, generalmente, la suplementación vitamínica. Las empresas de alimentación animal incluyen en sus formulaciones las vitaminas específicas que pueden favorecer a los animales de compañía a los que van destinadas. Por ejemplo, los piensos para animales mayores o sénior suelen estar suplementados con vitaminas antioxidantes para retrasar el envejecimiento celular, los destinados a perritos de crecimiento rápido, como las razas molosas (mastín, dogo) con vitamina D y niveles adecuados de calcio y fósforo, y los de hembras gestantes o lactantes con ácido fólico y vitamina E.
Las dietas caseras no suelen ser nutricionalmente equilibradas, son monótonas y deficitarias en vitaminas. En el caso de que se quiera alimentar con comida casera, es recomendable consultar con el veterinario para que nos diseñe una dieta que introduzca todos los ingredientes necesarios para cubrir no solo la palatabilidad (que sea agradable a su paladar), sino también las necesidades nutricionales de la mascota, incluidas las vitamínicas, en función de la raza, condición sanitaria, y su actividad o trabajo físico. Por ejemplo, la dieta destinada a un perro de raza Yorkshire de edad avanzada y con problemas cardiacos, será muy distinta a la de un galgo joven en crecimiento destinado a la competición.
Los propietarios suelen pensar que es interesante suplementar con vitaminas en algunas situaciones, como con los cachorros, para así favorecer su desarrollo y crecimiento, pero esto no es necesario si se da un alimento comercial de alta gama para cachorros. Estos piensos están especialmente diseñados para ofrecer una nutrición equilibrada y aportar la cantidad diaria recomendada de cada nutriente.
En qué enfermedades animales se necesitan vitaminas
En algunas enfermedades el veterinario recomendará determinados piensos, formulados con proporciones adecuadas de nutrientes, entre ellos vitaminas, o suplementación vitamínica específica para ayudar a su funcionalidad. Por ejemplo:
- En las alteraciones hepáticas graves, como la lipidosis hepática felina, se suplementa con vitaminas liposolubles, pues la insuficiencia del hígado no permite su almacenamiento.
- Las vitaminas del grupo B se suplementan en las alteraciones intestinales crónicas, como en el síndrome del mala absorción intestinal, o en presencia de déficits neurológicos.
Añadir determinados alimentos a la dieta del animal puede ser una manera de incrementar el aporte vitamínico, pero es más efectivo realizarlo con productos medicamentosos especialmente destinados a ello, en forma de pastillas, comprimidos, o jarabes, que contienen concentraciones conocidas de la vitamina en concreto. También existen presentaciones tópicas en forma de champús y spot-on para el cuidado de la piel y del pelo, fundamentalmente.
Creado: 18 de noviembre de 2016