El cuidado adecuado de nuestros compañeros felinos no sólo les ofrece la posibilidad de gozar de una mejor calidad de vida sino, en muchos casos, también la de disfrutar más años de vida. El veterinario José Luis Guerrero nos da algunas recomendaciones a tener en cuenta cuando vayamos a cortar las uñas de un gato, tanto para hacerlo de forma correcta, como para que ese momento no se convierta en una situación desagradable:
- Rutina desde cachorros: Lo ideal es acostumbrarles a cortarles las uñas desde pequeñitos. De esta forma cuando llegan a adultos ya saben lo que es.
- Sin peleas: es fundamental no pelearse nunca, bajo ninguna circunstancia, con el gato. El animal debe asociar el corte de uñas a una experiencia agradable, no a lo contrario.
- Momento relajante: cuando creamos que estamos ante el momento adecuado para el corte de uñas debemos tener a mano un cortaúñas, uno que nos resulte cómodo a nosotros y al gato, junto con unos premios. Cuando el gato venga a tumbarse sobre nosotros y esté relajado, entonces es una buena oportunidad para empezar la operación.
- Premiarle: entre el corte de una uña y la siguiente podemos ofrecerle un premio saludable; algo que le guste, además de caricias. Ante todo, hay que intentar mantener un clima de buen rollo con la mascota.
- Cuándo parar: se debe permanecer atento a las señales que usan los gatos para decirnos que quieren que les dejemos en paz. Lo sabremos si echan las orejas hacia atrás o empiezan a mover el rabo a latigazos, si ocurre esto es mejor parar y no seguir adelante. No pasa nada por dejarlo para otro día, ni hay por qué cortar todas las uñas de una sola vez.
- Siempre positivos: si el gato asocia el corte de uñas a una actividad desagradable, no conseguiremos cortárselas nunca, porque desaparecerá cada vez que nos vea con el cortaúñas en la mano. Todo lo que hagamos para convertirlo en un momento positivo, bienvenido sea.