Beneficios de vacunar a tu perro y posibles efectos secundarios
Veterinaria clínica de pequeños animales
Actualizado: 29 de julio de 2022
Con la vacunación del cachorro y las vacunas de recuerdo del perro adulto, estás ofreciéndole una buena calidad de vida, protegiéndole de enfermedades infectocontagiosas graves e incluso mortales, como la parvovirosis o el moquillo. Además, contribuyes a la erradicación de enfermedades transmisibles al ser humano, como la rabia, entre otros beneficios aportados por las vacunas caninas. Ten en cuenta que la revisión veterinaria previa a la inoculación es muy importante para verificar que tu perro está sano.
Eficacia de las vacunas caninas
Ninguna vacuna canina tiene una eficacia del 100%, aunque gracias a los avances científicos se acercan cada vez más a la efectividad total. Los factores que influyen en el correcto funcionamiento de una vacuna de este tipo dependen de la fabricación y conservación de la vacuna, la manipulación por parte del clínico veterinario y del estado del animal. Entre ellos, se encuentran la ruptura de la cadena del frío o el contacto con desinfectantes, que pueden inactivar la vacuna.
Factores a tener en cuenta antes de vacunar a un perro
Asimismo, para que el sistema inmune del can pueda generar una respuesta defensiva eficaz, el perro debe tener más de seis semanas, encontrarse en buen estado de salud, previamente desparasitado y sin signos de enfermedad infecciosa, ya que, de lo contrario, las defensas estarán focalizadas en la eliminación de los agentes infecciosos implicados y no podrán centrarse en generar defensas frente a los microorganismos frente a los que se ha vacunado.
Posibles riesgos de la vacunación canina
Al igual que en el ser humano, es posible que las vacunas desencadenen algún efecto secundario pasajero en el animal, como somnolencia durante unas horas, molestias o pequeños abultamientos en el punto de inyección que se resuelven espontáneamente en unos días. A veces, algunos perros, sobre todo los más pequeños, pueden sufrir una hipotensión (desmayo) justo tras la inyección. Es un reflejo del sistema nervioso que puede contrarrestarse fácilmente por sí sola o con ayuda de fármacos en unos minutos.
Generalmente, no se producen reacciones adversas graves, pero ningún perro está exento de poder sufrirlas. Las reacciones alérgicas se caracterizan por picor, hinchazón de la cara, formación de habones, vómitos y diarreas. El shock anafiláctico es una reacción más grave que puede llegar a causar dificultad respiratoria e incluso la muerte de la mascota, pero es extremadamente rara.
En cualquier caso, cualquier tipo de reacción vacunal no se manifiesta más allá de las primeras 24 horas tras la inoculación, por lo que es importante vigilar al animal en este periodo.
Creado: 8 de enero de 2018