Diagnóstico y perfil de paciente con el síndrome de Peter Pan
Actualizado: 11 de noviembre de 2022
El síndrome de Peter Pan carece de entidad diagnóstica en los principales manuales diagnósticos, sin embargo, este hecho no quiere decir que no exista y que no tenga implicaciones clínicas. Por ello, aunque sin hablar de criterios diagnósticos, si podemos hablar de una serie de comportamientos que, en caso de presentarse, sugieren la existencia de este síndrome:
- Intenso deseo y necesidad de ser cuidado por otras personas que él considera “más fuertes”.
- Incapacidad de comprometerse y de cumplir promesas.
- Incapacidad para asumir sus propias responsabilidades. Prefiere que lo hagan otros. Por eso, busca a otra persona que asuma el papel de su “padre”/”madre”.
- Quejas y críticas constantes acompañadas a su vez por la incapacidad de proporcionar afecto a otras personas.
- Tendencia al egoísmo; siente que todo debe girar en torno a él y se ofende cuando esto no ocurre.
- Dependencia especialmente emocional, aunque también es frecuente que exista dependencia económica.
- Su comportamiento es negativista o rebelde.
- Falta de empatía: este hecho le dificulta las relaciones sociales y le puede llevar a aislarse socialmente, lo que contrasta con un elevado miedo a quedarse solos.
- Baja autoestima lo que les produce una bajísima tolerancia a la frustración.
- Rasgos de personalidad narcisistas.
- Suelen sentirse insatisfechos con sus logros, pero no hacen nada para mejorar su situación.
- Verbalizan no querer envejecer, pudiendo idealizar su juventud.
Creado: 19 de julio de 2012