Que la madre trabaje influye positivamente en sus hijos

Las madres que trabajan fuera del hogar tienen una influencia positiva en sus hijos, ya que es más probable que sus hijas consigan un buen empleo, y que sus hijos colaboren en las tareas de la casa y el cuidado de la familia.
Una madre trabajadora con su hijo pequeño

Las investigadoras observaron que las mujeres con mayores ingresos procedían de hogares con madres trabajadoras.

Las madres trabajadoras influyen positivamente en el desarrollo de sus hijos, según revela un estudio realizado por la Escuela de Negocios de Harvard. Entre los beneficios que puede suponer el hecho de que la madre desempeñe una labor profesional fuera del hogar, destaca que sus hijas tienen más probabilidades de conseguir un empleo, y de ocupar cargos de responsabilidad con un mejor salario, mientras que los hijos varones ayudan más en las tareas de la casa, y dedican más tiempo a cuidar de sus familiares.

Que ambos progenitores tengan empleo favorece la economía doméstica, y enseña a los hijos que la contribución de los dos miembros de la pareja tiene la misma importancia

Las autoras del trabajo utilizaron datos de la encuesta La familia y el cambio en los roles de los géneros, incluida en el Programa Internacional de Encuestas Sociales, y en la que se entrevistó a 13.326 mujeres y 18.152 varones procedentes de 24 países, entre los años 2002 y 2012. Además, para realizar su análisis dividieron a los países en tres grupos dependiendo de su actitud frente a la igualdad entre hombres y mujeres, tanto en el hogar como en el ámbito laboral.

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Las investigadoras observaron que en los países desarrollados las mujeres dedicaban un promedio de 17,7 horas a la semana a cuidar de su familia frente a las 9 horas que invierten los hombres, y 17,8 horas a las tareas del hogar, en comparación con 8,8 que dedican los hombres, lo que demuestra que la desigualdad en el hogar continúa siendo un fenómeno muy arraigado.

Sin embargo, también comprobaron que las mujeres con mayores ingresos procedían de hogares con madres trabajadoras, por lo que Kathleen McGinn, la directora del estudio, ha afirmado que pocos factores han demostrado tener mayor influencia para reducir la desigualdad de género que el hecho de ser criado por una madre trabajadora, y añade que los resultados de su investigación sugieren que el que ambos progenitores tengan empleo no solo favorece la economía doméstica, sino que enseña a los hijos que la labor y la contribución de los dos miembros de la pareja tienen la misma importancia.

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Actualizado: 10 de enero de 2020

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