Así serán las medidas anti-COVID-19 en los colegios el próximo curso
21/05/2021
La principal novedad de la vuelta a las aulas en septiembre será que tanto en colegios como en institutos el número de alumnos por clase será prácticamente el mismo que había antes de la pandemia por coronavirus. Esto forma parte del acuerdo al que han llegado esta semana Isabel Celaá, ministra de Educación, y Carolina Darias, ministra de Sanidad, con los consejeros autonómicos de ambos ramos, en una reunión en la que se han aprobado las medidas higiénico-sanitarias para que el curso 2021-2022 sea seguro y presencial en todas las etapas educativas.
Las comunidades han conseguido así su objetivo de incluir más estudiantes en las aulas para conseguir la máxima presencialidad en todas las etapas educativas al tiempo que se reducen costos, ya que con esto se prevé prescindir de gran parte de los 35.000 profesores que se han incorporado este curso para reforzar el sistema educativo durante la crisis sanitaria por COVID-19. La comunidad educativa, por su parte, ha solicitado que se conserven estos puestos para mejorar la calidad de la enseñanza.
En los colegios las clases podrán volver a tener los mismos alumnos que tenían antes de la pandemia, es decir: hasta 25 en infantil (este curso son 20) y 30 en primaria (ahora son 25)
Una propuesta con la que está de acuerdo la ministra de Educación, que ha declarado que “las comunidades autónomas deben comprometerse y se están comprometiendo a que se mantengan al menos los recursos docentes de refuerzo con los que han venido contando este año. Tenemos que convertir la adversidad en oportunidad para acelerar la recuperación de un sistema educativo que se enfrentó a la pandemia tras años de recortes y debilitamiento”.
Número de alumnos y distancia interpersonal
En el documento aprobado el miércoles se indica que en los colegios las clases podrán volver a tener los mismos alumnos que tenían antes de la pandemia, es decir: hasta 25 alumnos en infantil (este curso son 20) y 30 en primaria (ahora son 25), ateniéndose a las ratios máximas establecidas por la normativa de cada autonomía.
Se mantendrá, eso sí, la fórmula conocida como 'grupos burbuja' o de convivencia estable, por los que los niños del mismo grupo se pueden relacionar sin mantener distancias de seguridad, pero no pueden interactuar con compañeros de otras clases. Estos grupos se mantienen en Infantil, en 1º, 2º, 3º y 4º de Primaria y en Educación Especial. Mientras que en 5º y 6º de Primaria se puede mantener el grupo estable, o bien la distancia de 1,5 metros, con posibilidad de reducir la distancia interpersonal a 1,2 metros.
Los alumnos y los profesionales educativos seguirán llevando mascarillas, se mantendrán turnos de entrada, salida, comedor y patio, y se ventilarán las aulas lo más posible
La medida sobre la distancia interpersonal ha variado, pasando de 1,5 metros de distancia a 1,2 metros, un cambio relevante porque de esta forma en casi todas las aulas entrará el mismo número de alumnos que antes del COVID-19, ya que la normativa que regula los requisitos que deben cumplir los centros escolares determina que en las aulas de los institutos debe haber “un mínimo de 1,5 metros cuadrados por puesto escolar”, lo que supone que la distancia interpersonal entre los alumnos en el interior del aula es de 1,44 metros cuadrados, es decir, que supera los 1,2 metros que se han acordado para el nuevo curso entre pupitres.
Se mantiene el uso de mascarillas y la ventilación
A pesar de los avances en la vacunación y que está previsto alcanzar la inmunidad de grupo durante el verano, en el documento indican que todavía no se ha decidido cuándo se vacunará a los niños y que es posible que algunas de las variantes del SARS-CoV-2 sean resistentes a la inmunización que confieren las vacunas.
Algunas de las medidas podrán relajarse en el caso de que los indicadores de la pandemia mejoren y se consiga llegar al escenario que Sanidad ha descrito como “nueva normalidad”
Por esto se ha decidido que tanto los alumnos como los profesionales que trabajan en las escuelas continúen llevando mascarillas (los niños a partir de los seis años) y que se mantengan estrictos turnos de entrada, salida, comedor y patio en los centros educativos, además de ventilar lo más posible las aulas y el resto de estancias y continuar con las prácticas de higiene como el uso de gel hidroalcohólico y el lavado de manos.
Algunas de estas medidas, sin embargo, podrán relajarse en el caso de que los indicadores de la pandemia mejoren y se consiga llegar al escenario que Sanidad ha descrito como “nueva normalidad” y que incluye parámetros como una incidencia a 14 días inferior a 25 casos por cada 100.000 habitantes y una ocupación de camas UCI por pacientes con COVID-19 menor del 5%. En este caso se podrían suprimir algunas medidas y, por ejemplo, los grupos burbuja podrían coincidir en el patio con alumnos de otras clases de su mismo nivel.
Además, aunque en España todavía no se ha decidido si se vacunará a los niños, en Estados Unidos ya se ha autorizado la vacunación del grupo de población de 12 a 15 años, y es probable que también la Unión Europea lo apruebe próximamente, por lo que es posible que a final de año los adolescentes estén vacunados, lo que podrá plantear el levantamiento de algunas de las medidas para prevenir el coronavirus en los centros escolares.
Actualizado: 5 de mayo de 2023