Avanzan hacia una vacuna contra virus respiratorios comunes en niños
01/03/2018
El virus respiratorio sincitial (VRS) y el metaneumovirus (MNV) humano son los principales responsables de la mayoría de las infecciones respiratorias graves –en especial bronquiolitis y neumonía– que afectan a los bebés y a los niños pequeños (con mayor incidencia hasta los dos años de edad, pero también hasta que cumplen cinco). Aunque aún no es posible prevenir estas enfermedades, un nuevo estudio ha probado en ratones unas proteínas que inducen la producción de anticuerpos que protegen frente a ambos virus, lo que puede contribuir a desarrollar una vacuna universal contra ellos.
Estas enfermedades son más frecuentes en invierno, y se estima que cada año 34 millones de niños se ven afectados por una infección grave por VRS, y entre cinco y ocho millones por el MNV. Además, alrededor del 10% de ellos necesitan ser hospitalizados, y unos 200.000 mueren anualmente por su causa, la mayoría en países con pocos recursos.
Cada año, 34 millones de niños se ven afectados por una infección grave por el virus respiratorio sincitial (VRS)
El virus respiratorio sincitial y el metaneumovirus pertenecen a la familia Pneumoviridae, y son muy similares clínica y biológicamente. Comparten, por ejemplo, la proteína de fusión F, que favorece la introducción de ambos patógenos en las células de un nuevo individuo. Sin embargo, durante este proceso la proteína se modifica y pasa de una forma prefusión (antes de entrar) a una forma postfusión (tras la entrada), y la unión de ciertos anticuerpos (neutralizantes) a la proteína impide que se produzcan dichos cambios y, por tanto, evita que el virus penetre en el organismo y provoque la infección.
Anticuerpos que protegen frente a ambos virus
Inmunológicamente el comportamiento del VRS y el MNV es muy diferente, y de ahí la dificultad de desarrollar una profilaxis válida en ambos casos. Para resolverlo, los investigadores del CIBER de Enfermedades Respiratorias (CIBERES) y del Centro Nacional de Microbiología (CNM) del Instituto de Salud Carlos III, con la participación de la Geisel Medical School de Estados Unidos, han empleado ingeniería genética para alterar las propiedades de las proteínas F de los dos virus.
De esta forma, han obtenido proteínas F quiméricas que contienen parte de la proteína del VRS y parte de la del MNV, y al inocular dichas proteínas en ratones de laboratorio han conseguido inducir la producción de anticuerpos que ofrecen una protección contra los dos virus, lo que abre la posibilidad de desarrollar una nueva vacuna universal frente a estos agentes infecciosos.
Además, esta estrategia, que se ha denominado "diseño de vacunas basadas en estructuras", se está utilizando en otro estudios con el objetivo de elaborar vacunas universales que protejan de otros virus como el de la gripe o el VIH, entre otros.
Actualizado: 2 de marzo de 2018