Las princesas Disney a consulta: revelan qué enfermedades las acechan
18/12/2024
Las princesas de los cuentos de hadas son admiradas e imitadas en todo el mundo. La compañía Walt Disney ha desempeñado un papel clave en su popularidad al producir películas basadas en estas historias y las voces críticas han advertido de los riesgos que entraña tanta perfección y que puede generar expectativas poco realistas que afecten a la autoestima de sus jóvenes admiradores, además de contribuir a que se mantengan muchos estereotipos.
Por ello la investigación se ha centrado hasta ahora en cómo esos estándares de belleza imposibles podían afectar a los espectadores infantiles, pero un grupo de investigadores ha dirigido ahora la atención a los potenciales problemas de salud que afrontarían 8 de estos personajes de ficción si se trasladasen al mundo real y los han descrito en un artículo publicado en la revista The Bmj de carácter satírico.
Problemas de salud de las princesas Disney
Aunque, como advierte el investigador Michael Bui en una nota publicada en la University of Twente, “el artículo es puramente satírico y no debe interpretarse como una crítica seria”, estos expertos han descrito con gracia y sorna, los principales riesgos para la salud a los que se enfrentan las ocho protagonistas analizadas.
Blanca Nieves vive aislada socialmente por su malvada madrastra, y la falta de interacción social, según diversos estudios, aumenta las probabilidades de sufrir depresión, ansiedad o enfermedades cardiovasculares, además de mayor mortalidad. Afortunadamente, su encuentro con los Siete Enanitos la saca de esta situación.
Jasmín, la protagonista de Aladdín, también tiene limitadas sus relaciones sociales al personal del palacio de Agrabah donde vive y a los personajes que desean casarse con ella. La soledad se ha relacionado con enfermedades mentales (ansiedad y depresión), demencia y alteraciones del sistema inmunitario, a lo que se añade el riesgo de convivir con su tigre Rajah, un animal salvaje que le podría causar lesiones o transmitir infecciones zoonóticas.
Cenicienta había disfrutado de una infancia feliz, pero, tras perder a su padre, su madrastra y hermanastras la obligan a encargarse de las tareas domésticas y la exposición continuada al polvo sin ninguna protección la pone en riesgo de desarrollar patologías del aparato respiratorio, una situación agravada por el uso de polvos mágicos por parte de su hada madrina, unos microplásticos recubiertos de aluminio que podrían empeorar sus problemas respiratorios.
Estrategias como el mindfulness, la psicoterapia, la capacitación para convivir con animales y medidas de protección contra agentes infecciosos podrían ayudar a que, finalmente, puedan vivir “saludables para siempre”
Pocahontas: la aventurera princesa se lanza al agua desde un acantilado cuyo tiempo aproximado de caída es de nada menos que nueve segundos. Simulaciones basadas en sus características físicas estiman que el acantilado tiene una altura de 252 metros, lo que supera sobradamente los límites seguros para los huesos al zambullirse. Si lo repitiera, en lugar de los “Colores en el Viento,” vería radiografías monocromáticas y escucharía una sinfonía de fracturas.
Aurora (La Bella Durmiente) se queda dormida tras ser maldecida por Maléfica y así continuará hasta que un príncipe la despierte con un beso. Un sueño tan largo puede provocarle enfermedades cardiovasculares o diabetes, además de atrofia muscular. Por otra parte, el hecho de que no pueda dar su consentimiento al príncipe para que este la bese va en contra de las normas sociales y el ‘final feliz’ queda totalmente desfasado.
Mulán es una heroína que se ve sometida a presiones familiares y sociales que se podrían calificar como violencia basada en el honor y que incrementan el riesgo de que sufra problemas de salud mental como la ansiedad.
Bella (La Bella y la Bestia): la bondadosa protagonista se ve obligada a convivir con la Bestia, una criatura que tiene rasgos de diferentes animales y que podría transmitirle graves enfermedades infecciosas como la rabia o la brucelosis. Aunque casi hubiera sido peor que se quedase con su pretendiente Gastón, un narcisista en cuya compañía hubiera podido sufrir problemas de salud mental.
Rapunzel (Enredados) luce una larguísima trenza de más de 21 metros y sufre tracción constante en el cuero cabelludo, lo que puede desencadenar alopecia por tracción y dolor persistente. El cabello mágico de Rapunzel constituye una fuente de molestias constantes y dolor de cabeza que pueden hacer mella en su estado de ánimo.
Las princesas de Disney parecen vivir “felices para siempre,” pero en realidad se encuentran rodeadas de graves riesgos para su bienestar y ha llegado el momento de que Disney adopte intervenciones que mejoren su salud. Estrategias como el mindfulness, la psicoterapia, la capacitación para convivir con animales y medidas de protección contra agentes infecciosos o partículas tóxicas podrían ayudar a que, finalmente, puedan vivir “saludables para siempre”, concluyen los investigadores.
Actualizado: 18 de diciembre de 2024