Los adolescentes solitarios tienen malas notas y peor salud mental

Experimentar la soledad, ya sea temporalmente o de manera continua, durante la adolescencia temprana puede aumentar el riesgo de acabar el colegio con malos resultados académicos, de desarrollar problemas de salud mental o de tener una peor calidad de vida futura, según ha encontrado un grupo de investigadores del King’s College de Londres (Reino Unido) al analizar a 2.232 personas de entre 12 y 18 años.

En los participantes se estudió su nivel de soledad percibida y se puso en relación con el rendimiento escolar y el bienestar mental que presentaban. Los resultados, que se han dado a conocer en la revista Development and Psychopathology, han mostrado que sentir soledad durante la adolescencia aumentaba el riesgo de autolesiones, mala salud mental, uso compulsivo del teléfono móvil y elecciones de estilo de vida poco saludables, como por ejemplo consumir tabaco, todo ello en comparación con aquellos que no se sintieron solos.

La investigación también encontró que aquellos que tenían 18 años y que habían pasado por períodos de soledad en los últimos seis años eran los más propensos a desarrollar problemas de salud mental, como depresión y ansiedad, así como niveles más bajos de satisfacción con la vida y peor calidad del sueño.

La soledad puede ser una experiencia angustiosa

En el caso contrario, los que se sentían solos cuando tenían 12 años, pero posteriormente dejaron de sentirse así, tenían un menor riesgo de resultados negativos en su salud mental más adelante, aunque todavía tenían más probabilidades de terminar el colegio con bajas notas. Los autores creen que esto podría deberse a que la soledad temprana causa una interrupción significativa, lo que tiene como consecuencia una pérdida que no se puede recuperar sin apoyo.

Aunque hay factores genéticos que hacen que algunos jóvenes se sientan solos, también hay factores ambientales clave, como un hogar lleno de amor y padres que apoyan

“Nuestro estudio demuestra que la soledad durante la adolescencia de una persona puede tener un impacto serio en su vida posterior. En 2018, casi la mitad de los niños de 10 a 12 años informaron sentirse solos al menos parte del tiempo, y hasta el 15% dijo que a menudo se sentía así. La soledad, aunque sea temporal, puede ser una experiencia extremadamente angustiosa, y debemos hacer todo lo posible para apoyar a quienes lo necesitan para que puedan superarla”, ha explicado el Dr. Timothy Matthews, autor principal del estudio.

Otro de los hallazgos del trabajo reveló que aunque hay ciertos factores genéticos que hacen que algunos tengan más riesgo de sentirse solos de manera persistente, también había factores ambientales clave, como tener un hogar lleno de amor y padres que apoyan e influyen de manera positiva en sus hijos.

Por tanto, es muy importante que se intervenga de manera temprana en los casos de jóvenes que se sientan solitarios, especialmente en la adolescencia temprana. Para ello, se deben extremar los esfuerzos para identificar y dotar de apoyo a todos los que lo necesiten; de esta manera se evitarán muchos problemas mentales.